El papa Francisco levantó en Baréin una oración por el Líbano “tan sufrido”, por “Ucrania martirizada” y por “todos los pueblos que sufren en Oriente Medio”, al término de su primera visita al pequeño país musulmán del Golfo.
El sumo pontífice también agradeció a las autoridades por su acogida, durante un encuentro con el clero católico en la iglesia del Sagrado Corazón en la capital Manama.
El papa saludó a los fieles del Líbano presentes y dedicó una oración a ese “bien amado” país, “tan cansado y sufrido, y a todos los pueblos que sufren en Oriente Medio” según declaró Francisco en su último discurso público en Baréin, aludiendo a la grave crisis económica y social libanesa.
“Y tampoco quiero olvidarme de rezar y de decirles a ustedes que recen por la martirizada Ucrania, para que esa guerra termine”, agregó. El papa invitó además a los miembros de la Iglesia a promover el diálogo “con los hermanos de otras creencias y confesiones” en una “sociedad interreligiosa y multicultural”.
Pero uno de los mensajes que llamó la atención tuvo que ver precisamente con la religión. Aunque no se refirió directamente a una en específico, sí dejó entrever el extremismo que a veces se maneja en algunos países musulmanes en enfoques religiosos. “No basta con decir que una religión es pacífica, es necesario condenar y aislar a los violentos”, dijo el papa argentino.
Además, dejó claro que en un mundo globalizado, el tema religioso no debe dividir, sino unir. “Esta tierra es una imagen viva de coexistencia en diversidad e incluso una imagen de nuestro mundo, cada vez más marcado por la constante migración de pueblos y por el pluralismo de ideas, costumbres y tradiciones”, afirmó Francisco.
El papa ha convertido la relación con el islam en uno de los pilares de su papado. Hace tres años, en Emiratos, celebró una misa ante 170 mil personas y firmó una declaración cristiano-musulmana a favor de la paz. Desde su elección en 2013, Francisco ha visitado una decena de países de mayoría musulmana, entre ellos Jordania, Turquía, Bosnia y Herzegovina, Egipto, Bangladés, Marruecos e Irak.
Hubo protestas en la visita del papa Baréin
Unas 30 mil personas asistieron a la misa celebrada por el papa Francisco en el estadio nacional de Baréin, en el tercer día de visita, que quedó marcado por una protesta de familias de condenados a muerte en este reino musulmán del golfo.
La Policía detuvo brevemente a 10 personas que se manifestaron frente a una escuela donde el pontífice debía hablar y pidieron reunirse con él, dijo el Instituto de Baréin para los Derechos y la Democracia (Bird), grupo con sede en Londres. “¡La tolerancia no existe para nosotros aquí en Baréin!”, rezaba el cartel que llevaba Hajar Mansur, madre del activista encarcelado Sayed Nizar al Wadaei, director de la ONG Bird.
El papa, que no estuvo en contacto directo con los manifestantes, fue recibido con bailes y flores dentro del colegio Sagrado Corazón, donde llamó a los estudiantes a “adoptar la cultura del cuidado” y a “dialogar”.
*Con información de la AFP.