Según la investigadora palestino-estadounidense, decana de la escuela de asuntos públicos e internacionales de la universidad, dos tercios de la población gazatí, sometida desde 2007 al bloqueo israelí, no confía en el poder islamista “corrupto” y “autoritario” de Hamás.
“Está la ocupación israelí” de los Territorios Palestinos y “están los regímenes de Hamás y de la Autoridad Palestina que con el tiempo se han vuelto más dictatoriales y autoritarios”, dice Jamal en una entrevista con la AFP en Princeton.
“El palestino medio (...), acostumbrado a la ocupación de la única potencia (israelí), vive ahora bajo la ocupación de los dos” poderes, el israelí y el palestino, analiza esta politóloga de 52 años nacida en California y que pasó su juventud en Ramalá, ciudad de origen de su familia.
Con su colega Michael Robbins, Jamal creó el Arab Barometer (Barómetro árabe), que desde 2006 realiza estudios sociológicos y sondeos de opinión cada dos años en 16 países de Oriente Medio y el norte de África.
La 8ª edición (“What Palestinians Really Think of Hamas” - “Qué piensan realmente los palestinos de Hamás”) fue realizada en los territorios palestinos entre fines de septiembre y el 6 de octubre, con una muestra de 790 personas en Cisjordania y 399 en la Franja de Gaza.
La encuesta fue interrumpida debido a los ataques de Hamás en Israel, en los que murieron 1.200 personas. Los resultados sorprendieron a estos especialistas.
Sin confianza en Hamás
“Antes de los ataques del 7 de octubre, el 67 % de los palestinos de Gaza no confiaba o confiaba poco en Hamás”, asegura Jamal. Este resultado debería cambiar la “tesis de que toda la Franja de Gaza apoya a Hamás y que, por tanto, toda la Franja de Gaza debería ser considerada responsable de los actos atroces perpetrados por Hamás”, al que Israel, Estados Unidos y la Unión Europea califican de grupo “terrorista”.
Jamal y Robbins publicaron hace un mes sus inesperadas conclusiones en la revista científica Foreign Affairs y la investigadora los comentó en un pódcast del diario The New York Times.
En Gaza, los encuestadores se centraron en el bloqueo económico que Israel impone al territorio desde 2007. “¿A quién considera responsable de sus problemas económicos?”, preguntaron. “Pensábamos que el culpable primero sería Israel debido al bloqueo, pero la mayoría de la gente citó la corrupción de Hamás”, dice.
El “9 %” de Abás
“Lo que dicen los habitantes de Cisjordania y Gaza en este sondeo es que, para rematar las cosas, la corrupción de sus gobiernos se suma al bloqueo israelí”. El presidente palestino Mahmud Abás, que fue elegido por última vez en 2005, solo cuenta con el “9 %” de opiniones favorables.
Antes del 7 de octubre en Gaza, “dos tercios (de las personas interrogadas) declaraban que en los últimos 30 días no habían tenido los medios para alimentar a sus familias”, dice la politóloga. Una muestra de que la sociedad gazatí está económicamente “desfavorecida” y en conflicto con el “poder corrupto de Hamás”.
Sin elecciones desde 2006, la mayoría de los gazatíes “está en contra del autoritarismo de Hamás” insiste Amaney Jamal. De hecho, antes del 7 de octubre, el “60 % decía que no podía expresar libre y abiertamente su opinión, y el 72 % no se podía manifestar pacíficamente por temor a las represalias”.
¿Esta hostilidad de la opinión pública palestina contra Hamás se ha reforzado o reducido tras seis semanas de guerra que han dejado cerca de 14.900 muertos en Gaza, según las autoridades de Hamás?
Jamal y Robbins habían respondido sobre este tema en Foreign Affairs a finales de octubre: “El sufrimiento soportado por los palestinos probablemente los ha radicalizado, lo que podría socavar la paz y la estabilidad a largo plazo”.
Antes del 7 de octubre, el “80 %” de los palestinos encuestados deseaba una solución negociada con Israel; de ellos, el “56 % estaba a favor de una solución de dos estados y el resto, a favor de una solución de un estado o de una confederación”, dice la investigadora.
Para ella, “la población de Gaza parecía favorable a una solución de dos estados, a una reconciliación pacífica con Israel sobre la base de las fronteras de 1967″. Solo el “20 %” restante prefería la “resistencia armada”, asegura.
*Con información de AFP.