En Italia se presenta un fenómeno natural que está causando preocupación entre los expertos y los habitantes de las zonas aledañas al mar. Son varias ciudades en las que se ha visto que el mar se ha retirado de las costas, que ahora permanecen húmedas y con un bajo nivel de agua.
Sin embargo, esa reducción de agua no solo afecta las zonas costeras de Italia, sino que un fenómeno similar se viene presentando en Venecia, donde, incluso, los canales se mantienen secos, lo que impide la circulación de las famosas góndolas.
El fenómeno en esa ciudad, originó, además, dificultades en la labor de los barcos-ambulancia y otras embarcaciones oficiales.
Pero esta situación no solo afecta a Italia, también se presentan otros países como Siria, Egipto, Libia, Marruecos, Líbano, Israel, Turquía, Grecia y Francia.
De acuerdo con expertos, este fenómeno estaría relacionado con un sistema de alta presión en Europa, al que se atribuyen las condiciones secas y la escasez de agua.
Explicaron que las llamadas “mareas vivas” ocurren cuando la fuerza gravitacional de la Luna se le suma la del Sol, pero en la actualidad estas se han registrado en la misma línea.
Pese a estas explicaciones, algunas personas relacionan la situación actual al reciente terremoto en Turquía, que dejó más de 50.000 muertos tanto en ese país como en Siria. Sin embargo, científicamente no hay ningún sustento que permita determinar que así sea.
Entre tanto, los meteorólogos indicaron que el retiro del mar en Italia es una actividad que solo se verá por días y luego retomará la normalidad, señalando que no se debe generar alarma entre los habitantes de las zonas costeras.
El fenómeno ha sido comentado en redes sociales. ¿Por qué los mares están retrocediendo en todo el mundo? “El retiro del mar en Italia (y en otros países), según expertos, se debe a un sistema de alta presión en Europa. Algunas personas atribuyen el retiro del mar en Italia a los recientes sismos de Turquía”, escribió Renata Barreto, quien compartido dos publicaciones de medios de comunicación.
Al tiempo que se presenta esta situación, Italia atraviesa por una sequía histórica por la escasez de lluvias y la falta de nieve en las montañas aledañas.
Ante esto, el ministro de Italia para la Protección Civil y las Políticas del Mar, Nello Musumeci, propuso un plan de racionamiento sano y realista del agua, para hacer frente a esta problemática.
“En el futuro inmediato, la única solución es un plan de racionamiento sano y realista, pues el uso de agua potable para fines no domésticos podría monitorearse en áreas críticas”, dijo en una entrevista con el diario La Stampa.
El funcionario señaló la caída de las lluvias es del 40 % respecto a la media en precipitaciones que se presentaron en 2022.
“Cualquier racionamiento es en todo caso una elección de los alcaldes y presidentes regionales. Sin estas y otras iniciativas seguiremos persiguiendo el milagro de la lluvia que nunca llega”, indicó el funcionario tras reconocer que la disminución de las lluvias ha ocasionado una reducción significativa en el volumen de los ríos y lagos más importantes del país.
Enfatizó que en Italia solo usan “el 11 % de lo que cae cada año. Entonces se necesita mantenimiento en presas y redes de agua urbana que en muchos casos son un colador. Además, ¿por qué no usar agua de lluvia purificada para regar los campos?”.
Entre tanto, la organización ecologista Legambiente se pronunció sobre el impacto que ha tenido esta situación, tras señalar que, por ejemplo, el río Po, el más grande del país, se encuentra en un mínimo histórico de niveles de agua, pues muestra una disminución del 61 % en su volumen habitual de agua.
Señaló que, alrededor del Po, en regiones que representan un tercio de la producción agrícola del país, se decretó el estado de emergencia después de experimentar su peor sequía en 70 años.
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Consorcios de Cuenca, Francesco Vincenzi, indicó que, al menos, 3,5 millones de italianos se podrían ver afectados en los próximos meses con un racionamiento de agua.