El paso de la tormenta Daniel por Libia, generó que varias cantidades de agua arrastraran poblaciones enteras dejando casi 4.000 muertos y miles de desaparecidos, según informan los organismos de emergencia nacionales e internacionales.

Los testigos compararon las inundaciones con un tsunami. Dos represas del río Wadi Derna se rompieron y provocaron riadas de aguas y lodo que arrasaron edificios, vehículos y a las personas que se encontraban dentro de ellos.

Así quedó el azul del mar Mediterráneo opacado por el barro que llevó la avalancha. | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

Muchas personas fueron arrastrados al mar por la potencia de la avalancha y ya empezaron a aparecer cadáveres en el mar Mediterráneo, cuya agua se volvió marrón como el barro.

Debido a la gran cantidad de personas que han perdido la vida, los ciudadanos de Libia han tenido que recurrir a recoger los muertos de las calles y hacer entierros masivos para que no se presente una emergencia sanitaria debido a la descomposición de los cadáveres.

Las imágenes difundidas en las redes sociales por cadenas de televisión locales muestran un paisaje apocalíptico en Derna, con calles devastadas, edificios arrasados, puentes destruidos y deslizamientos de tierra.

Derna ahora solo es accesible por dos entradas al sur (suele haber siete). Los cortes de energía generalizados y las interrupciones en la red de telecomunicaciones limitan las comunicaciones, según la OIM.

La organización también reportó 3.000 personas desplazadas en Al Bayda y más de 2.000 en Bengasi, dos ciudades ubicadas más al oeste.

La avalancha causó varios derrumbes en carreteras de Libia. | Foto: SEMANA

Según el portavoz del ministerio del Interior del gobierno instalado en el este del país, el teniente Tarek al Kharraz, se han contabilizado hasta ahora 3.840 muertos en la ciudad de Derna, de los cuales 3.190 ya fueron enterrados. Entre las víctimas figuran al menos 400 extranjeros, principalmente sudaneses y egipcios.

¿Qué ocurrió en Libia?

La tormenta Daniel llegó a la costa oriental de Libia el domingo 10 de septiembre, primero a la metrópoli de Bengasi y luego hacia el este hacia las ciudades de Jabal al Akhdar (noreste), Shahat (Cirene), Al Marj, Al Bayda y Susa (Apolonia), pero sobre todo Derna.

En la madrugada del lunes 11 de septiembre se rompieron dos represas en Wadi Derna que retenían las aguas de una rambla, un cauce en medio de la ciudad que suele llevar agua en época de lluvias.

Varios testigos contaron a los medios libios haber escuchado una “gran explosión” antes de que enormes torrentes llegaran a la ciudad, desbordando las orillas y llevándose por delante puentes y barrios enteros con sus habitantes.

Libia recibe ayuda del mundo

La Comisión Europea anunció el envío de ayuda de Alemania, Rumanía y Finlandia a Derna como parte del mecanismo de protección civil de la Unión Europea, que además movilizó 500.000 euros (unos 540.000 dólares).

Reino Unido anunció una ayuda de un millón de libras (1,25 millones de dólares), y reveló que la ONU desbloqueó diez millones de dólares del Fondo Central de Respuesta a Emergencias (CERF).

Jordania envió un avión lleno de ayuda humanitaria e Italia anunció el miércoles la partida de un barco y dos aviones militares para transportar expertos y equipos logísticos.

Egipto instalará campamentos en el oeste del país para refugiar a los supervivientes, según el diario estatal Al Ahram.

“Dada la escala y complejidad de las necesidades, es imperativo que se despliegue un enfoque bien coordinado y multiagencial”, subrayó la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

Con información de AFP