De acuerdo con el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, este país “no permitirá que nadie nos imponga ninguna concesión” como parte de un plan que podría juntar esfuerzos para desescalar la amenaza de conflicto con Rusia.
En entrevista con CNN, el funcionario ucraniano señaló que a pesar de que existen temores sobre la idea de que Rusia pueda invadir su país, ellos como nación no aceptarán ningún compromiso que los relacione directamente con Vladimir Putin. “Si alguien hace una concesión sobre Ucrania, a espaldas de Ucrania, en primer lugar, no lo aceptaremos. No estaremos en la posición del país que levanta el teléfono, escucha la instrucción de la gran potencia y la sigue”, aseguró Kuleba.
Dymtro KulebaHemos pagado mucho, incluidas 15.000 vidas de nuestros ciudadanos, para asegurar el derecho a decidir nuestro propio futuro, nuestro propio destino
Para el ministro, el plan de Rusia consiste en desestabilizar al país antes de que haya cualquier invasión militar. Sin embargo, las grandes potencias occidentales ya han hecho fuertes advertencias a este país señalando que no debe emprender acciones agresivas contra los ucranianos.
El Kremlin niega dichos ataques, pero asegura que la Otan se está volviendo una amenaza latente para la frontera entre su país y Ucrania.
Países occidentales advierten de “graves consecuencias” a Rusia si agrede a Ucrania
Los dirigentes de Estados Unidos y varios países europeos, entre ellos Alemania, afirmaron su apoyo “sin reserva” a la integridad territorial de Ucrania y advirtieron de “graves consecuencias” a Rusia en caso de invasión de ese país, según anunció el Gobierno alemán.
Los participantes “coincidieron en que Rusia debe emprender iniciativas visibles de desescalada” en este conflicto, indicó el portavoz del canciller alemán Olaf Scholz, tras una videoconferencia en la que participó con los dirigentes de Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia y Polonia.
La celebración de esta videoconferencia había sido anunciada un poco más temprano en la jornada por la Casa Blanca, cuando algunas divergencias parecían surgir en el campo occidental sobre la actitud a adoptar frente a Rusia.
Esto concierne especialmente a Alemania, muy criticado por Ucrania por su rechazo a suministrarle armas, incluso defensivas, como lo hacen Estados Unidos, Gran Bretaña o los países bálticos.
Asimismo, los países de la Unión Europea no han decretado aún la salida de una parte de su personal diplomático de Ucrania, cuando Estados Unidos y Gran Bretaña hicieron anuncios en ese sentido.
En la videoconferencia, en la que participaba también el secretario general de la Otan, los dirigentes occidentales expresaron su “gran preocupación” frente a la concentración de tropas rusas en la frontera oriental de Ucrania y acusaron a Rusia de causar las “tensiones actuales”, según el comunicado alemán.
Pero consideraron que “el asunto de la seguridad y la estabilidad en Europa podía ser resuelta por la vía de la negociación”.
También “reiteraron que están dispuestos a continuar los esfuerzos diplomáticos en ese sentido”, iniciados en enero con varios encuentros de funcionarios occidentales y rusos, sin éxito hasta ahora.
Asimismo, hace poco se conoció que Estados Unidos podría, en el caso de un ataque ruso a Ucrania, prohibir la exportación de tecnología a Rusia, según afirmó un alto funcionario de la Casa Blanca.
“Estamos hablando de tecnologías sofisticadas que diseñamos y producimos”, declaró el funcionario a la prensa. Esto incluiría inteligencia artificial, computación cuántica y tecnología aeroespacial y sería “un fuerte golpe para las ambiciones estratégicas del (presidente Vladimir) Putin de industrializar su economía”.
*Con información de AFP.