Esta semana se pusieron en marcha los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 en medio de estrictas restricciones de bioseguridad por cuenta de la pandemia del coronavirus, especialmente en el marco del actual pico de contagios que sufre Japón, país sede de los recientes Juegos Olímpicos y que ahora alberga los decimosextos Paralímpicos de la historia.
Justamente, el país nipón anunció en las últimas horas que prevé extender a la mayoría de territorios de la nación las medidas de salud que ya están vigentes en algunas regiones, en un intento de frenar la propagación de la covid-19, que está provocando un récord de contagios que preocupa a las autoridades sanitarias.
“La transmisibilidad de la variante delta es extremadamente fuerte. Necesitamos más cooperación de la población para superar esta crisis”, declaró el primer ministro japonés Yoshihide Suga.
En total, 33 de los 47 departamentos del país, incluida la capital Tokio en la que se desarrollan las competencias deportivas, se verán afectados por las medidas anunciadas, según una lista aprobada este miércoles por un comité de expertos en salud y que debe oficializarse rápidamente en todos los territorios que más sufren el pico de contagios.
Desde finales de junio, Japón sufre una quinta ola de coronavirus, la más violenta hasta la fecha desde que se inició la pandemia, agravada por la propagación de la variante delta.
Según los reportes sanitarios, el viernes pasado se registró un récord de infecciones en el país (casi 25.900 casos en 24 horas) y en Tokio el promedio de nuevos contagios en siete días se quintuplicó en seis semanas.
Debido a este brote, el sistema hospitalario japonés se encuentra “en una situación grave”, según advirtió este miércoles el ministro encargado de la lucha contra la pandemia, Yasutoshi Nishimura.
Por esa razón, las autoridades gubernamentales decidieron extender el estado de emergencia de 13 a 21 departamentos, lo que le permite imponer que los bares y restaurantes cierren más temprano y no sirvan alcohol. Las medidas también permitirán limitar los movimientos de la población.
El gobierno prevé igualmente pedir a los centros comerciales y grandes tiendas que restrinjan el número de clientes que acogen simultáneamente. A las empresas, por ejemplo, se les pedirá que privilegien el teletrabajo para reducir los desplazamientos diarios de los empleados en un 70 %.
Por otra parte, el ministro encargado de la lucha contra la pandemia, Yasutoshi Nishimura, pidió a los gobernadores de todos los departamentos que refuercen las infraestructuras médicas, comenzando por reservas de oxígeno y más personal.
Además de las restricciones, Japón también espera intensificar la campaña de vacunación, que actualmente ha inmunizado a un 42 % de la población total de 126 millones de personas. Desde el comienzo de la pandemia en diciembre de 2019, Japón registró 15.600 muertos por covid-19, según cifras oficiales.
Cabe resaltar que el presidente de la Asociación Médica de Japón, Toshio Nakagawa, solicitó a comienzos de agosto que se decretara el estado de emergencia en todo el territorio con el objetivo de contener el aumento de contagios de coronavirus, sobre todo en la capital del país en la que se desarrollaron los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
A finales de julio el gobierno japonés se dispuso a prolongar el estado de urgencia sanitaria en Tokio, la capital del país, debido al incremento de los casos de covid-19, incluso entre los participantes de los Juegos Olímpicos. El número de casos diarios de coronavirus en ese momento superó los 10.000 por primera vez desde que se inició la pandemia.
Las autoridades sanitarias temen sobre un brote masivo impulsado por la presencia de la variante delta, debido a que es un alto número de infectados comparable con los inicio de la pandemia hace un poco más de un año y medio en Wuhan, China.
Con información de AFP.