Los restos del cohete chino Long March 5B regresarán a nuestro planeta este fin de semana luego de haber estado en órbita desde la semana pasada, en el marco de una misión en la que el país asiático buscará construir su propia estación espacial para finales del 2022.

No obstante, las alarmas internacionales se han encendido al conocer que los restos de la aeronave de 50 metros de altura se dirigen sin control hacia la Tierra, por lo que algunos expertos han especulado sobre el lugar y la fecha exacta del regreso.

El portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, Mike Howard, aseguró en un comunicado que el “punto exacto de entrada (del cohete) a la atmósfera de la Tierra” no se puede establecer hasta dentro de unas horas”, mientras algunos medios de comunicación estadounidenses han informado que se prevé que la fecha exacta sea el próximo 8 de mayo.

En ese sentido, los medios estadounidenses indicaron que el Escuadrón de Control Espacial número 18 de Estados Unidos entregará actualizaciones diarias sobre la ubicación del cohete por medio del sitio web Space Track.

Si bien gran parte de los desechos espaciales se quemarán en la atmósfera, el gran tamaño del cohete Long March 5B ha generado preocupación, pues algunas piezas podrían entrar a la Tierra y causar daños si golpean áreas habitadas.

La prensa oficialista china ha asegurado que son pocas las posibilidades de que los escombros generen daños o pérdidas humanas una vez el cohete entre a la atmósfera y, por el contrario, han indicado que “se ha exagerado la noticia”.

(Ju Zhenhua/Xinhua via AP) | Foto: Xinhua

En lo que coinciden las autoridades espaciales es que se tratará de una de las mayores entradas no controladas de una estructura de ese tipo en toda la historia, por lo que esperan que el suceso no genere riesgos para ninguna zona poblada.

De hecho, algunos expertos han planteado que la inclinación orbital del Long March 5B indica que el cuerpo del cohete podría pasar por una región ubicada al norte de Nueva York, Madrid o Pekín y al sur de Chile y Wellington en Nueva Zelanda.

Si las proyecciones de los investigadores se cumplen, el cohete podría hacer su reentrada al planeta Tierra en cualquier punto dentro de esta zona.

¿Qué tan riesgoso será?

“No creo que la gente deba tomar precauciones. El riesgo de que haya algún daño o de que golpee a alguien es bastante pequeño. No es despreciable, podría suceder, pero el riesgo de que te golpee es increíblemente pequeño. No perdería ni un segundo de sueño por esto como una amenaza personal”, dijo a la cadena CNN Jonathan McDowell, experto del Centro de Astrofísica de la Universidad de Harvard.

Sistema solar | Foto: Getty Images

Por su parte, el Pentágono ha resaltado que por ahora nadie tiene la capacidad de determinar el lugar exacto donde ocurrirá el hecho y que lo único probable es que la estructura del cohete vuelva a entrar en la atmósfera terrestre el 8 de mayo.

“El Mando Espacial de Estados Unidos conoce y rastrea la ubicación del Long March 5B chino en el espacio, pero su punto exacto de entrada en la atmósfera terrestre no puede ser precisado hasta horas después de su reentrada, que se espera alrededor del 8 de mayo”, señalaron los expertos a través de un comunicado.

McDowell explicó que en estos momentos no se puede establecer la zona donde caerían los escombros debido a la velocidad a la que viaja el cohete Long March 5B y que sería el océano la apuesta más segura sobre dónde aterrizarían.

“Si quiere apostar a dónde aterrizará algo en la Tierra, apueste por el Pacífico, porque el Pacífico es la parte más extensa de la Tierra. Es así de simple”, agregó el experto al medio mencionado anteriormente.