En las redes sociales han aparecido imágenes que muestran los restos de un avión militar ruso, que habría sido supuestamente derribado por el grupo Wagner, en una zona rural del sur de Rusia.

El avión habría sido destruido el pasado sábado 24 de junio, en el segundo día de la sublevación del Grupo Wagner, que llevó al país a vivir de cerca la posibilidad de un golpe de Estado.

Qué pasó

De acuerdo con la cadena estadounidense CNN, el avión corresponde a un Ilyushin-22, de la Fuerza Aérea Rusa, un avión que generalmente es utilizado como centro de comunicaciones y como comando aéreo.

De parte del Ministerio de Defensa de Rusia no se ha conocido ningún comentario sobre la pérdida de ningún avión y, por ahora, no está clara la causa del accidente.

El avión habría sido destruido el pasado sábado 24 de junio, en el segundo día de la sublevación del Grupo Wagner, que llevó al país a vivir de cerca la posibilidad de un golpe de Estado. | Foto: AP

Las imágenes que capturan el momento en el que cae un avión a la tierra, dejan ver a una nave encendida en llamas, que habría sido impactada por un misil o un cohete.

Testimonios

De acuerdo con CNN y otros medios que recogen el testimonio de Irina Kuksenkova, corresponsal del canal estatal ruso Channel One, el avión habría caído cerca de Voronezh.

Al menos 10 personas de la tripulación habrían muerto y, según Kuksenkova, el jefe de Wagner, Yevgeny Prigozhin, se ofreció a compensar a los familiares de la tripulación muerta.

El pasado domingo también apareció un video de los restos de un helicóptero Ka-52, en el distrito Talovsky de la región de Voronezh.

El levantamiento de Wagner

Todo inició cuando Yevgueni Prigozhin, el jefe del grupo paramilitar Wagner, advirtió el pasado viernes que contaba con 25.000 efectivos decididos a llegar “hasta el final” y “destruir todo lo que se interponga” en su camino.

El jefe de Wagner afirmó que sus hombres habían sido bombardeados por el ejército ruso, cerca de la línea de frente con Ucrania y acusó al ministro de Defensa, Serguéi Shoigu, de haber ordenado esos ataques. | Foto: Reuters / Servicio de prensa de "Concord"/Handou

El jefe de Wagner afirmó que sus hombres habían sido bombardeados por el ejército ruso, cerca de la línea de frente con Ucrania y acusó al ministro de Defensa, Serguéi Shoigu, de haber ordenado esos ataques.

Unas acusaciones que son una mera “provocación” y “no se corresponden con la realidad y son una provocación”, replicó el Ministerio de Defensa.

“Estamos muriendo por el pueblo ruso, que debe ser liberado de quienes bombardean a la población civil”, afirmó, en referencia al destacado papel de los mercenarios en importantes batallas en Ucrania.

“Hay que poner freno a quienes tienen responsabilidad militar en el país”, insistió el jefe paramilitar, llamando a los rusos a unirse a sus tropas y a no oponer resistencia.

¿Golpe de Estado?

Los movimientos de Prigozhin, que llegó a conquistar la región de Rostov en menos de 48 horas, hicieron pensar en algo que parecía impensable en la era de Vladímir Putin, la posibilidad de un golpe de Estado.

Lukashenko negoció con Prigozhin, hasta que aceptara no proseguir a Moscú y retirarse, sin ser procesado legalmente en Rusia por el intento de golpe de Estado. | Foto: AP

La amenaza estuvo vigente entre el viernes 23 y el sábado 24 de junio. Yevgeny Prigozhin, el creador del Grupo Wagner, apareció en un video amenazante asegurando que tenía las capacidades, con más de 25.000 hombres a su cargo, de cambiar el poder en el Kremlin.

Finalmente la amenaza fue neutralizada, gracias a la intervención de Alexander Lukashenko, el presidente del país aliado más importante para Rusia, Bielorusia. Lukashenko negoció con Prigozhin, hasta que aceptara no proseguir a Moscú y retirarse, sin ser procesado legalmente en Rusia por el intento de golpe de Estado.