Este lunes, varios manifestantes fueron desalojados la Knesset o Parlamento de Israel, cuando intentaban protestar contra la tramitación de la denominada ley de razonabilidad, parte de la contestada reforma judicial que impulsa el Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu.
Arrastrados
Los agentes de seguridad de la Knesset han sacado por la fuerza a los manifestantes arrastrando a varios de ellos por el suelo para alejarlos del pleno de la Cámara, que podría aprobar la iniciativa este lunes en primera lectura, de acuerdo con lo que informa el medio Times of Israel.
El presidente de la Knesset, Amir Ohana, ha alabado la labor de los agentes para evitar que “una banda de delincuentes interrumpa el pleno de la Knesset”.
Críticas
Fuera, en los alrededores de la sede parlamentaria, los manifestantes se han concentrado para protestar por la medida, cuestionada por limitar la capacidad del Tribunal Supremo para examinar las decisiones del Gobierno y dañar así la división de poderes.
El presidente de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, Simcha Rothman, defendió en cambio una ley “equilibrada” y “responsable”, lo que ha provocado las protestas de los diputados de la oposición. Tres diputados del partido centrista opositor Yesh Atid han sido expulsados del pleno por interrupción.
Mientras, el dirigente opositor Benny Gantz ha advertido de que la reforma judicial “va a aplastar al país entero si no la paramos ahora”. “La ley que están intentando aprobar hoy aquí es el inicio de un peligroso proceso que elimina restricciones al Gobierno y borra el control judicial”, argumentó. “Esta bola de nieve está empezando a rodar hoy aquí y crecerá, ganará impulso y aplastará al país entero si no la detenemos ahora”, añadió.
Pedido
Gantz ha apelado directamente a Netanyahu: “No abandone al Estado de Israel. No abandone a los ciudadanos de Israel. No abandone la seguridad y la economía. Pare todo. Envíe a su equipo a la sede de la Presidencia ahora mismo, que se hable allí de todo y con un punto de vista a largo plazo. Será difícil, sí”, indicó. “La responsabilidad es suya. El resultado de este proceso nos hará daño a todos”, remarcó.
Por su parte, el también opositor Yair Lapid acusó a los partidos de la coalición del Gobierno de tramitar esta ley con fines “corruptos” y “egoístas”. “Al menos digan la verdad. Es una ley con la que pueden nombrar ministros a criminales convictos, despedir al fiscal general. ¿Para quién trabajan?”, reprochó.
Buscando la aprobación
Mientras se desarrollaba el debate de la ley en la Knesset, la Oficina de Netanyahu emitió una nota en la que informa al presidente Isaac Herzog de que no tiene previsto paralizar la tramitación de esta ley para facilitar el diálogo con la oposición, según recoge la televisión pública Kan.
El objetivo es que la ley se apruebe y se convierta en ley antes del receso estival de la Knesset, según fuentes de Kan que advierten de que el Gobierno caería si no se aprueba la iniciativa.
Netanyahu había defendido en un video publicado antes de la votación que esta iniciativa para eliminar la “razonabilidad” “no es el fin de la democracia, sino que la refuerza”.
El Gobierno ha retomado la tramitación por partes de la propuesta de reforma judicial mientras las negociaciones con la oposición se encuentran suspendidas. Los aliados de Netanyahu defienden su legitimidad para tramitar la reforma judicial basada en su mayoría parlamentaria, mientras las movilizaciones y protestas iniciadas ya hace 27 semanas exigen su retirada total.
Además se ha convocado una nueva protesta para el martes para forzar que el Ejecutivo dé marcha atrás a la reforma. “Tiene que ser una movilización como jamás se ha visto en Israel, el martes, el primeo de los tres votos en pleno de la ley que impediría a los tribunales ejercer una revisión judicial de la razonabilidad de las decisiones del Gobierno”, destacaron los convocantes.
*Con información de Europa Press.