El jefe de la agrupación paramilitar rusa Wagner, que había sido hasta hace poco clave en la ofensiva militar rusa en Ucrania, acusó este viernes al Ejército regular de Moscú de bombardear sus bases y llamó a la población a sublevarse contra el mando militar.
Amenazas de Wagner
El Ejército negó esas acusaciones y las calificó de “provocación”. Los servicios rusos abrieron una investigación contra el jefe del grupo de mercenarios, Yevgueni Prigozhin, por tentativa de amotinamiento y en las calles de Moscú se vive un ambiente de zozobra. Hay presencia de tanques de guerra en la capital, en respuesta a las amenazas del jefe del grupo Wagner.
Prigozhin, quien fue considerado durante mucho tiempo como aliado cercano del presidente ruso, Vladimir Putin, fue ganando influencia política y se lanzó en una confrontación con autoridades políticas y militares, que ahora parece haber desbordado el campo de la retórica.
Tanques en las calles
Imágenes en redes sociales dejan ver que las calles de Moscú están ocupadas en varios sitios por tanques militares y tropas con armamento, especialmente en los alrededores del Ministerio de Defensa.
Distintas cuentas en redes sociales permiten ver equipos militares pesados haciendo presencia en las calles de la capital rusa. La aparente tranquilidad de las calles contrasta con los tanques y los militares armados.
“Prigozhin ha pedido a la Guardia Nacional Rusa que se una a su lado para luchar contra el Ejército ruso”, dice un trino compartido por Jason Jay Smart, un asesor político que ha vivido y trabajado en Ucrania, que hace parte del diario Kyiv Post.
Este trino, al igual que muchos otros, muestra las imágenes de lo que se está viviendo en Moscú. También algunas personas han publicado imágenes que, declaran, corresponderían a una unidad militar que está en llamas, en una región cercana a Moscú.
Refuerzos
La agencia noticiosa estatal rusa Tass informó este sábado 24 de junio que las autoridades reforzaron las medidas de seguridad en Moscú, tras el llamado del jefe del grupo paramilitar Wagner a la rebelión contra el mando militar.
“Las medidas de seguridad en Moscú han sido reforzadas. Todas las instalaciones críticas de gobierno e infraestructura de transporte están bajo protección reforzada”, indicó Tass citando fuentes de seguridad.
Las acusaciones
El jefe del grupo Wagner asegura que varios miembros del grupo paramilitar murieron en los ataques: “Un gran número de nuestros combatientes murió”, dijo, antes de prometer que respondería a ellos.
“El comité de comando del grupo Wagner decidió que hay que poner freno a quienes tienen responsabilidad militar en el país”, prosiguió el jefe de los mercenarios, de 62 años, en un mensaje de audio que se ha dado a conocer también en redes sociales.
*Con información de la AFP.