Un terremoto de poca profundidad sacudió el sureste de Australia el miércoles por la mañana, cerca de Melbourne, la segunda ciudad del país, donde algunas personas salieron corriendo a la calle por el temblor de los edificios.

El sismo, poco habitual en el país, se produjo sobre las 9:00 a. m. del miércoles al este de Melbourne y se sintió a cientos de kilómetros de distancia. Según el servicio geológico estadounidense, su magnitud fue de 5,8 y su profundidad de 10 kilómetros.

Imágenes en redes sociales mostraban escombros de lo que parecían ladrillos desprendidos de los edificios en una popular área comercial de Melbourne, Chapel Street.

“Estábamos todos trabajando y todo empezó a temblar”, dijo a AFP Parker Mayo, empleado de un café, de 30 años. “Fue bastante violento, pero todos estábamos en choque”, añadió.

Los terremotos de esta magnitud son inusuales en el poblado sureste de Australia, lo que contribuyó al espanto de los ciudadanos.

“Estaba sentado en mi escritorio del trabajo y tuve que salir corriendo. Me tomó un tiempo darme cuenta de qué era”, dijo a la cadena pública ABC Mark Mansfield, el alcalde de Mansfield, cerca del epicentro.

Los servicios de emergencias señalaron que habían recibido llamados de asistencia desde lugares a 700 km del epicentro.

¿Qué hacer durante un temblor?

Los movimientos terrestres son comunes en la naturaleza así que desde los departamentos de Gestión de Riesgo se han establecido pasos o guías para cuidarse en medio de un movimiento sísmico.

En esos momentos, se debe tener en cuenta lo siguiente:

•No ubicarse debajo de los marcos de las puertas, ya que no son un lugar seguro. El marco ayuda a disipar la energía del sismo, por lo cual puede romperse y colapsar.

•Si está en una silla de ruedas, ubicarse al lado de una columna o lugar seguro, frenar la silla y proteger la cabeza con los brazos. Asegurarse de que sus lugares de estudio y trabajo cuenten con medidas específicas para apoyarle en la evacuación.

•Si está en su vivienda y solo si es posible, abrir la puerta principal y de las habitaciones, ya que se podrían trabar y dejar a sus habitantes encerrados.

•Si está acostado y no puede dirigirse a un sitio seguro, permanecer en la cama o a un costado y proteger la cabeza con los brazos o una almohada.

•Si está en la calle, observar el entorno y buscar un lugar seguro. Procurar estar lejos de postes y cables. Alejarse de las fachadas, pues de las mismas pueden caer partes como ladrillos o vidrios. Con precaución dirigirse al centro de la calle y tener cuidado con los vehículos, ya que es posible que los conductores no hayan sentido el sismo.

•Si va conduciendo un vehículo en las calles y percibe un sismo, reducir la velocidad y, en lo posible, detenerse en un lugar seguro (alejado de postes, cables, vallas).

•Si se encuentra en un lugar público como un teatro o una sala de cine, quedarse en su silla, proteger la cabeza con los brazos y esperar a que el sismo termine; luego evacuar el lugar. Conservar la calma y procurar que los demás también lo hagan. Si se presenta una asonada (estampida) producto del pánico, no quedarse quieto en un punto fijo, moverse con todas las personas, alzar a los niños pequeños. Seguir las instrucciones del personal de seguridad y logística.

•Si está en la costa y el sismo fue tan fuerte que es difícil mantenerse en pie, retirarse lejos de la playa en busca de sitios altos; el sismo pudo haber generado un tsunami y tendrá algunos minutos para ponerse a salvo.