Nayib Bukele dio un discurso después de su victoria en las elecciones presidenciales el pasado domingo 4 de febrero. El reelecto mandatario expresó:
“Me decía un periodista español de un periódico, El País, ‘¿por qué quieren desmantelar la democracia?’, y yo le dije: pero, ¿de qué democracia nos estás hablando? Democracia significa el poder del pueblo y si el pueblo salvadoreño quiere esto, por qué va a venir un periodista español a decirnos lo que los salvadoreños tenemos que hacer? ¿De qué democracia hablan? Él habla de la democracia que le dicen sus jefes allá, en España, pero eso no es democracia, eso sería colonia, imperialismo, elitismo, plutocracia, pueden llamarle como quieran, pero no se llama democracia, porque la democracia es que los salvadoreños decidimos cómo nos queremos autogobernar.
Los salvadoreños amamos a España, Europa y todos los países de estados unidos y los respetamos, no les pedimos nada, lo único que les pedimos es respeto. Nosotros respetamos su monarquía hereditaria, pero ustedes están en la obligación de respetarnos”.
Tras este suceso, se dio a conocer, por medio de las redes sociales, un video en el que una periodista independiente realiza una pregunta a Nayib Bukele en medio de burlas y comentando que “el periodismo ya está muerto”:
Periodista: ¿Qué cree usted que hay detrás de toda esta prensa que está manipulada, estos medios de comunicación que le dirigen a usted un ataque continuo y que incluso lo hicieron esta mañana los diarios en España? Como decían que iba a instaurar un partido único, y, sin embargo, todos estos periodistas están siendo testigos de que aquí hay una democracia totalmente limpia, observadores internacionales, centenares de ellos. Después de un ambiente de fiesta increíble, yo misma estuve anoche andando sola por San Salvador para corroborar como periodista que son ciertos esos datos. ¿Qué hay detrás de estos datos?, ¿por qué el periodismo ha muerto?
Presidente Bukele: “Claro, les ha de doler cuando tú dijiste eso, porque en el fondo saben que es verdad, pero no pueden aceptarlo, pues significaría aceptar que su trabajo es engañar a la gente. Hay una razón que veo yo. Si bien El Salvador no es un país grande, no es un país rico, es un país hermoso, playas, pero no tenemos petróleo, no tenemos grandes minas de oro o de diamantes, entonces, ¿cuál podría ser el interés?
Pero está claro que hay un ataque orquestado de muchos medios internacionales, entonces, yo sinceramente creo que el problema de El Salvador, es que ellos tenían un plan, para todos nuestros países, y les ha funcionado perfectamente en Ecuador, en Colombia y todos los países fueron cayendo, mira la realidad de Chile.
Chile para nosotros era el país más desarrollado de Latinoamérica, el país de ensueño, estaba a un paso del primer mundo, y mira como va ahora, como está cayendo, y cuando vemos eso, el plan estaba funcionando perfectamente, meter esa ideología es totalmente falto de sentido común.
Esas soluciones como, “hay criminales, quitemos las leyes contra los criminales, hay mucho crimen, quitemos los fondos a los policías, hay mucha droga, repartamos droga a los jóvenes, pareciera como si todo lo que se tuviera que hacer, se decidiera hacer al revés”.
Más adelanté, continuando con su respuesta, el presidente aclaró: “Pero claro, tontos no son, entonces ellos saben escribir motivaciones y argumentaciones por los cuales esas políticas que no tienen sentido común. Son buenas, y se la lograron meter a la ONU, a la OEA a las ONG, medios de comunicación, y empezó a funcionar y la gente empezó a aplaudir porque ni modo, o aguantar o a reclamar como tú y ser despedidos por reclamar.
Entonces, de repente, viene el país por el que nadie da un centavo, el país más pequeño, más peligroso, más desahuciado de toda América y demuestran que se puede, que con las políticas contrarias a los que ellos aplican, se pueden resolver el problema más grave que teníamos aquí.
Y luego, cuando crezcamos económicamente, cuando arreglemos la salud, la educación, el turismo, cuando crezca nuestra economía, cómo le van a decir a sus pueblos: ‘sigamos aplicando estas recetas sin sentido común, porque aquel país que nadie daba un peso por él, aplicó las recetas que nosotros no aplicamos, que nos dijo que estábamos equivocados y tenían la razón, también está equivocado’”, añadió el mandatario.
Luego, continuó: “Entonces el problema de El Salvador no es el país en sí; el problema de El Salvador es el poder del ejemplo. Si un país tan pobre, sin recursos, tan pequeño, puede demostrarles que las cosas se pueden hacer, si hay voluntad y sentido común y si se rechazan todas esas ideologías que no tienen ningún sentido, entonces se les caen las narrativas.
Y ellos viven de las narrativas, cómo pueden soportar esto, en el fondo debe doler mucho y deben trabajar para destruirlo, porque permitir que El Salvador salga adelante es una bofetada a sus ideologías y es una bofetada a todo lo que ellos tratan de hacerle creer a sus progresiones y que sus progresiones ahorita mismo en España están sufriendo por culpa de la aplicación de esas ideologías”, concluyó Bukele.