El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó este viernes que espera que los talibanes se comporten de forma “civilizada” en Afganistán para que los otros países puedan tener relaciones diplomáticas normales con Kabul.

Dando cuenta de la situación, el presidente ruso consideró que “cuanto más rápido entren los talibanes en la familia de los pueblos civilizados, más fácil será mantener contactos, comunicarse” con ellos y así “influir de un modo u otro [en ellos], plantear[les] preguntas”.

Sin embargo, durante su intervención en el Foro Económico Oriental de Vladivostok, Putin expresó que la situación en Afganistán “es una catástrofe” tras la salida de las tropas internacionales.

Durante su intervención en el Foro Económico Oriental de Vladivostok, Putin expresó que la situación en Afganistán “es una catástrofe” tras la salida de las tropas internacionales. | Foto: AFP

“Es una catástrofe, es cierto (...). Es una catástrofe porque los estadounidenses, que son personas muy pragmáticas, han gastado más de 1,5 billones de dólares en esta campaña(militar) y ¿cuál es el resultado?”, cuestionó el mandatario.

En ese sentido calificó la crisis en ese país de una “catástrofe humanitaria”. Al respecto sostuvo: “Y si nos fijamos en la cantidad de personas abandonadas en Afganistán, que han trabajado para Occidente, para EE. UU. y sus aliados, entonces esto es una catástrofe humanitaria”.

Entretanto, defendió, en este sentido, las “relaciones civilizadas” y el “respeto de las normas civilizadas”.

Durante su anterior mandato, de 1996 a 2001, los talibanes se dieron a conocer por su rigurosa aplicación de la ley islámica y su trato a las mujeres, que tenían prohibido estudiar, trabajar o salir a la calle sin compañía de un hombre.

“Rusia no tiene interés alguno en una desintegración de Afganistán, si esto sucediera no quedaría nadie con quien hablar”, apuntó además el mandatario.

En las últimas semanas, las autoridades rusas han adoptado una actitud bastante conciliadora hacia los talibanes, constatando su victoria y pidiendo un “diálogo nacional” para formar un gobierno representativo.

Aún así, Moscú continúa considerando a ese grupo como “terrorista”, pese a llevar años dialogando con el movimiento islamista.

Las autoridades rusas están sobre todo preocupadas por la seguridad de las exrepúblicas soviéticas de Asia Central, fronterizas con Afganistán, y por la posibilidad de que emerjan nuevos grupos yihadistas inspirados por los talibanes o apoyados por ellos.

El Kremlin también desea evitar un flujo regional de refugiados y un nuevo auge del tráfico de opio y de heroína.

Aún así, Moscú continúa considerando a ese grupo como “terrorista”, pese a llevar años dialogando con el movimiento islamista.+ | Foto: Reuters

El pasado miércoles, el mandatario ruso señaló que los 20 años de guerra y de presencia estadounidense en Afganistán han sido una “tragedia” para este país.

“Durante 20 años los soldados estadounidenses estuvieron presentes en este territorio, 20 años tratando de +civilizar+ a las personas que viven allí, de implantar sus normas y estándares de vida”, comentó Putin en un encuentro con jóvenes retransmitido por televisión.

“El resultado es una tragedia, pérdidas para Estados Unidos y más aún para las personas que viven en Afganistán”, agregó.

En cuanto al futuro del país después de la retirada de los estadounidenses y de sus aliados, Putin consideró “imposible imponer nada desde el extranjero”.

“La situación tiene que madurar y si queremos que madure más rápido y mejor habrá que ayudar a la gente”, afirmó.

Las autoridades rusas han adoptado una actitud relativamente conciliadora hacia los talibanes, reconociendo su victoria, al tiempo que les pidieron un “diálogo nacional” para formar un gobierno representativo.

*Con AFP