El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, alto jerarca de la Iglesia de Inglaterra y líder espiritual de la Comunión Anglicana mundial, renunció hoy 12 de noviembre, después de que una investigación determinara que no informó a la policía sobre la serie de abusos físicos y sexuales cometidos por un voluntario en campamentos de verano cristianos tan pronto como tuvo conocimiento de ello.

La presión sobre Welby aumentó desde la semana pasada, cuando la publicación de los hallazgos de la investigación encendió la ira por la falta de rendición de cuentas en los niveles más altos de la iglesia.

“Es muy claro que debo asumir la responsabilidad personal e institucional por el largo y retraumatizante período entre 2013 y 2024″, dijo Welby en el comunicado donde anuncia su dimisión. “Creo que apartarme es lo mejor para la Iglesia de Inglaterra, a la cual amo y a la que he tenido el honor de servir”.

El papa Francisco intercambia regalos con el arzobispo de Canterbury, el reverendísimo Justin Welby, durante una reunión con los Primados de la Comunión Anglicana en el Palacio Apostólico el 2 de mayo de 2024 en la Ciudad del Vaticano, Vaticano. | Foto: 2024 Vatican Pool

Helen-Ann Hartley, la obispa de Newcastle, dijo que la posición de Welby era “insostenible” después de que algunos miembros de la asamblea nacional de la iglesia iniciaran una petición solicitando su renuncia debido a que había “perdido la confianza de su clero”.

Sin embargo, el clamor más fuerte provino de las víctimas de John Smyth, un destacado abogado que abusó durante cinco décadas de adolescentes y jóvenes en campamentos de verano cristianos en Gran Bretaña, Zimbabue y Sudáfrica.

Andrew Morse, quien fue golpeado repetidamente por Smyth durante un período de cinco años, dijo que renunciar era una oportunidad para que Welby comenzara a reparar de manera más amplia el daño causado por el manejo, por parte de la iglesia, de los casos históricos de abuso.

La renuncia de Welby se produce en el contexto de un abuso sexual histórico generalizado en la Iglesia de Inglaterra. En un informe de la Investigación Independiente sobre Abuso Sexual Infantil divulgado en 2022 se encontró que la deferencia a la autoridad de los sacerdotes, los tabúes en torno a la discusión de la sexualidad y una cultura que brindaba más apoyo a los presuntos perpetradores que a sus víctimas ayudaron a hacer de la Iglesia de Inglaterra “un lugar donde los abusadores podían esconderse”.

El rey Carlos III y el arzobispo de Canterbury, el reverendísimo Justin Welby, en una recepción de líderes religiosos durante una visita a la nueva biblioteca del Palacio de Lambeth para conmemorar la Semana Interreligiosa, cuyo objetivo es fortalecer las relaciones interreligiosas. | Foto: 2023 Getty Images

Los simpatizantes de Welby argumentaron que él había sido muy importante para cambiar la cultura de la iglesia desde que se convirtió en arzobispo de Canterbury en 2013.

Pero fue una investigación sobre crímenes que comenzaron mucho antes de esa fecha lo que finalmente llevó a su caída.

La iglesia publicó el jueves los resultados de una investigación independiente sobre Smyth, quien abusó sexual, psicológica y físicamente de unos 30 niños y jóvenes en Reino Unido y 85 en África a partir de la década de 1970.

En el informe de 251 páginas de la Revisión Makin se concluyó que Welby no informó a las autoridades sobre Smyth cuando supo del abuso en agosto de 2013, poco después de convertirse en arzobispo de Canterbury.

El rey Carlos III es coronado con la corona de San Eduardo por el arzobispo de Canterbury, el reverendísimo Justin Welby, durante su ceremonia de coronación en la Abadía de Westminster, el 6 de mayo de 2023 en Londres, Inglaterra. | Foto: 2023 Getty Images

*Con información de Associated Press.