Tesla, la empresa fundada por Elon Musk, el hombre más rico del planeta, quiere revolucionar al mundo con sus autos eléctricos, pero las polémicas alrededor de sus productos se han vuelto una constante para la empresa.
Ahora, la manzana de la discordia es un problema de fábrica del que se han quejado varios dueños de estos autos en diversas partes del mundo.
De acuerdo con un empleado citado por la agencia Reuters, la empresa de Musk habría programado sus tableros para exagerar la distancia que pueden recorrer con una sola carga.
El informante aseguró también que la idea fue del engaño fue del propio Musk, pero el inconveniente fue detectado por usuarios que se comunicaron con la empresa para recibir atención al respecto.
En ello, señaló también Reuters, Tesla también habría obrado de una madera dudosa, al crear un equipo completo de desvío, con sede en Las Vegas, destinado a acallar las quejas de los clientes acerca de la autonomía de los carros.
Este grupo, según datos de los propios gerentes de la empresa, le ahorró a la compañía 1.000 dólares por cada cita que cancelaron, valiéndose de engaños.
Según Forbes, el problema con los datos de los tableros se enfoca en que su programación ignoró factores externos como el clima, dado que temperaturas o sumamente altas o sumamente bajas pueden alterar la distancia que recorren estos vehículos.
Otros factores que se dejaron de lado fueron las posibilidades de terreno montañoso, vientos en contra, o el uso del aire acondicionado, de acuerdo con datos de la empresa especializada Recurrent Auto.
No es claro si los algoritmos imperfectos de los tableros se siguen usando, advirtió la agencia Reuters.
Sin embargo, a principios de este año, la compañía fue multada en Corea del Sur con 2.2 millones de dólares, justamente por mentir sobre la autonomía de sus carros, exagerándola hasta en un 50 por ciento.
Reuters también anotó que Tesla llevaría largos años mintiendo sobre la autonomía, pues todo habría comenzado cuando solo había lanzado dos modelos al mercado.
Uno de esos era el Roadster, de dos puertas, descontinuado actualmente. El otro es el sedán deportivo de lujo Model S.
En la actualidad, la firma vende otros tres modelos, además del Model S, es decir, el Model 3, el Model X y el Model Y.
Según Forbes, la autonomía no ha sido el único motivo de descontento entre los clientes de Tesla.
Hay quienes se han quejado, igualmente, de que los volantes de sus carros se desprenden en plena conducción.
Otra queja muy frecuente es que las luces de advertencia son inestables y se encienden cuando no hay un problema o no se encienden si en realidad lo hay.
Clientes igualmente han mencionado que los carros frenan sin motivo.
Para colmo, a principios de junio, se desató otro escándalo a causa de cinturones de seguridad defectuosos, lo cual obligó a la revisión de 15.000 vehículos.
La imagen de la empresa también se vio seriamente cuestionada debido a su sistema Autopilot, del cual se dijo que fue la causa de varios accidentes. Además, un ingeniero también hizo ver mal a la compañía, al decir que un video sobre la conducción autónoma estaba preparado.