El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, reclamó este lunes (10 de julio) asegurar el acceso de Turquía a la Unión Europea, como condición para levantar su veto al ingreso de Suecia a la OTAN, apenas un día antes de una cumbre en Lituania que debería lanzar un mensaje de unidad sobre el apoyo a Ucrania.
La nueva condición mencionada por Erdogan cayó como un baldado de agua fría a la intención de la OTAN de presentar un frente unido.
Reunión en Lituania
La intención de la cumbre de Vilna, Lituania, era ofrecer un apoyo de largo plazo a Ucrania, a 500 días del inicio de la ofensiva de Rusia, aunque la declaración de Erdogan abrió una fisura que se esperaba cerrar en la reunión de líderes.
Poco después de desembarcar en Vilna, Erdogan se reunió con el primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, y el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, para tratar de destrabar la cuestión del acceso sueco a la OTAN.
Desde que la OTAN invitó a Suecia a sumarse a la alianza militar, Turquía advirtió sobre su veto alegando que el gobierno sueco ofrecía protección a opositores y activistas kurdos que las autoridades turcas consideran terroristas.
La sospresiva exigencia
Sin embargo, en la jornada, Erdogan sorprendió al imponer su nueva condición para desbloquear el ingreso de Suecia a la OTAN y referirse al acceso de Turquía a la Unión Europea, UE, que se encuentra virtualmente congelada desde hace una década.
Turquía presentó su candidatura para sumarse a la Unión Europea en 1987, y fue considerado elegible en 1999, aunque en la última década la aproximación ha sido virtualmente nula.
“Abran primero la vía a la adhesión de Turquía a la Unión Europea y después abriremos la vía a Suecia, como abrimos la vía a Finlandia”, declaró el mandatario turco antes de abordar su vuelo hasta Vilna.
El jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, criticó inmediatamente esta condición y aseguró que la candidatura de Turquía al bloque europeo “no está relacionada” con la adhesión de Suecia a la alianza.
Además, apuntó Scholz, Suecia “cumple con todos los requisitos” para convertirse en miembro de la OTAN.
Ucrania y la OTAN
La cumbre de la OTAN tendrá como asunto central, sin embargo, la relación de la alianza militar transatlántica con Ucrania, país que pide con insistencia garantías de seguridad y futura adhesión.
Sobre la adhesión de Ucrania a la alianza militar, el grupo levantará un importante obstáculo en el proceso: el requisito del llamado Plan de Acción para la Adhesión (Membership Action Plan, MAP, en inglés), un dispositivo que establece una serie de objetivos de reformas.
Los aliados “están dispuestos” a eliminar esta exigencia para la adhesión de la candidatura de Ucrania, dijo a AFP un funcionario occidental de la alianza, que requirió el anonimato.
Este plan “es solo una de las etapas del proceso de adhesión en la OTAN. Incluso si se elimina, Ucrania deberá realizar otras reformas antes de integrar la OTAN”, preció el funcionario. El ingreso a corto plazo parece, no obstante, descartado.
Estados Unidos y Alemania insisten en una promesa imprecisa sobre la futura adhesión de Ucrania, sin determinar un calendario.
Toma tiempo
“No creo que esté lista para formar parte de la OTAN”, afirmó el presidente estadounidense, Joe Biden, a la red CNN, añadiendo que tampoco había unanimidad entre los aliados sobre la integración de Ucrania “en medio de una guerra”.
“Estaríamos en guerra con Rusia si ese fuera el caso”, advirtió. “El proceso de adhesión a la OTAN toma su tiempo”, agregó el funcionario.
El gobierno ruso consideró que el ingreso de Kiev en la alianza sería “muy negativo” para la seguridad en Europa.
Para contrarrestar esta posición y mostrar su apoyo, varios pesos pesados de la OTAN negocian posibles compromisos para suministrar armas a largo plazo a Kiev, máxime cuando las fuerzas ucranianas lanzaron en junio una contraofensiva para recuperar zonas ocupadas rusas, pero avanzan lentamente.
Con información de AFP.