El Gobierno de Estados Unidos informó este viernes 29 de julio la adquisición de nuevas vacunas contra la covid-19. Sin embargo, la novedad de estos lotes es que son biológicos aprobados por las entidades de salud para combatir directamente la variante ómicron del virus, además de sus subvariantes BA.4 y BA.5.

Así entonces, los contratos fueron hechos con los laboratorios Pfizer y Moderna, aunque con el primero la negociación fue informada algunos días antes, y con el segundo se acabó de concretar por un valor total de 1.740 millones de dólares, para adquirir 66 millones de dosis y la posibilidad de ampliar las reservas hasta con 234 millones de dosis adicionales.

Con respecto a la adquisición de Pfizer, el Gobierno estadounidense informó que de este laboratorio estaría enviando las primeras 105 millones de dosis a comienzos del otoño, mientras que las de Moderna estarían llegando desde el otoño hasta el invierno boreal de este año.

“Debemos mantenernos vigilantes en nuestra pelea contra la covid-19 y continuar expandiendo el acceso de los estadounidenses a las mejores vacunas y tratamientos... De cara al otoño y el invierno, estamos haciendo eso: garantizando que los estadounidenses tendrán las herramientas necesarias para mantenerse a salvo y ayudar a que el país siga adelante”, expresó Xavier Becerra, secretario de Salud de Estados Unidos en medio de un comunicado a la opinión pública.

Aunque el gobierno Biden ha gastado enormes cantidades en la adquisición de vacunas contra la covid-19, ahora estarían centrando su estrategia en comprar dosis que combatan las variantes y subvariantes que han dominado en los últimos meses la pandemia, siendo entre otras, la ómicron, la BA.4 y BA.5.

Por lo que el Gobierno de este país ha indicado que, a pesar del gran gasto que acaban de realizar, este pedido no sería suficiente para cubrir el total de la población estadounidense, por lo que se espera que el Congreso apruebe más presupuesto para la compra de biológicos adicionales.

“Esperamos recibir estas nuevas vacunas para variantes específicas y trabajar con nuestros socios de atención médica estatales y locales para que las vacunas estén disponibles de forma gratuita en las comunidades de todo el país este otoño”, continuó expresando a través de un comunicado Dawn O’Connell, subsecretaria del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.

Joe Biden, ejemplo de la eficacia de la vacunación contra la covid-19

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, abandonó el período de cuarentena por coronavirus iniciado hace casi una semana, tras dar negativo en dos pruebas consecutivas. Así lo confirmó el médico del primer mandatario, Kevin O’Connor, en un comunicado, donde detalló que los leves síntomas que manifestaba el jefe de Estado “ya casi se han resuelto por completo”.

“Dados estos factores tranquilizadores, el presidente suspenderá sus estrictas medidas de aislamiento... De vuelta al Despacho Oval. Gracias al doctor por la buena atención y a todos ustedes por su apoyo”, señaló O’Connor, a quien más tarde el propio Biden agradeció su trabajo durante estos días.

El caso de Biden, quien cuenta con el esquema completo de vacunación, más dos dosis de refuerzo contra el coronavirus, le ha servido a la Administración estadounidense para alentar a la población a inmunizarse. De hecho, el propio presidente celebró más tarde una rueda de prensa en los jardines de la Casa Blanca en la que aseguró que la ciudadanía puede tomar decisiones personales orientadas a evitar “casos graves”.

“Ahora se pueden prevenir la mayoría de las muertes por covid-19, y eso se debe a tres herramientas gratuitas en las que la administración Biden ha invertido y ha distribuido: vacunas de refuerzo, pruebas en casa y tratamientos efectivos y fáciles de usar”, dijo.