La Agencia de Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos aprobó esta semana la primera combinación de medicamentos de acción prolongada para el Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), las cuales podrían remplazar las píldoras diarias que deben tomar las personas que padecen de esta enfermedad.
El combo de dos inyecciones, llamado Cabenuva, podría ofrecer a los pacientes más privacidad y la oportunidad de mantenerse al día con sus medicamentos, debido a que solo se tendrá que administrar una dosis al mes y no varias pastas al día como ocurre actualmente.
“Eso mejorará la calidad de vida” por necesitar tratamiento solo una vez al mes, dijo el doctor Steven Deeks, especialista en VIH de la Universidad de California en San Francisco, quien agregó que “la gente no quiere esos recordatorios diarios de que está infectada con el VIH”.
Este nuevo tratamiento combina rilpivirina, vendida como Edurant por la unidad Janssen de Johnson & Johnson, y un nuevo fármaco, cabotegravir, de ViiV Healthcare. En este momento se está trabajando la posibilidad de dosificar el medicamento cada dos meses.
ViiV indicó que el costo de este nuevo medicamento estaría cercano a los US$6.000 en su primera dosis, debido a que es más alta, y luego tendría un valor de US$3.960, lo cual estaría dentro “del rango” de precios del mercado.
Un estudio adelantado por la compañía señaló que los pacientes preferirían mucho más las inyecciones mensuales que las píldoras.
“Incluso las personas que toman una pastilla una vez al día simplemente informaron una mejoría en su calidad de vida para cambiar a una inyección”, dijo la doctora Judith Currier, especialista en VIH de la Universidad de California en Los Ángeles, quien agregó que este nuevo medicamento permitirá llegar a personas que tienen dificultades para cumplir con el tratamiento.
Además de este nuevo tratamiento, varios medios en Estados Unidos indicaron que ViiV está planeando pedir la aprobación de cabotegravir, un medicamento para la prevención del VIH, ya que algunos estudios encontraron que las inyecciones de este fármaco cada dos meses eran mejores que las píldoras diarias de Truvada para evitar que las personas no infectadas contraigan el virus de una pareja sexual infectada.
Estudian contagio de VIH por herramientas de manicure
En un estudio publicado en la revista AIDS Research and Human Retroviruses, los investigadores explicaron que una mujer de 22 años tenía pruebas de enfermedad avanzada, aunque nunca había sido sometida a cirugías, transfusiones de sangre, piercings, tatuajes ni relaciones sexuales.
Según informó la mujer, la única conexión posible con el VIH ocurrió hace más de diez años, cuando compartió ciertos instrumentos de manicure con una prima, efectivamente infectada con VIH. Sin embargo, la mujer aclaró que en ese momento no sabía que su prima estaba infectada.
“Investigaciones posteriores revelaron que ambas mujeres portaban versiones del virus tan similares que apuntaban a un origen común”, según Live Science.
Aunque sí existe riesgo de contraer otras enfermedades por compartir instrumentos de manicure, hasta ahora este el primer caso conocido en el que se señala directamente al tratamiento estético como culpable de un contagio de VIH en el mundo.
Uriel Fense, director médico de asesoramiento y pruebas de VIH en el Centro de VIH/SIDA del Centro Médico Montefiore en Nueva York, cree que es poco probable que muchas personas se hayan infectado a través de esos modos de transmisión.
“El hecho es que la gente percibe erróneamente su riesgo todo el tiempo y hay una gran proporción de personas que tienen VIH y no lo saben porque no se dieron cuenta de que en realidad estaban en riesgo en algún momento”, agregó.
En el caso de la mujer en Brasil, la carga viral es especialmente alta pues al no saber que estaba contagiada, no tomó ningún medicamento contra el VIH.
Si la prima de la joven hubiera tomado estos medicamentos, la transmisión no hubiera ocurrido ya que lo que hacen estas medicinas es reducir la carga viral, y si se toman a tiempo es muy poco probable su contagio.