El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que los países que reciben armas estadounidenses deben respetar el Derecho Internacional en un memorando emitido el jueves por la noche que dio a conocer la BBC. La orden ejecutiva exige que los gobiernos extranjeros que reciben ayuda militar proporcionen garantías por escrito de que respetan las leyes de la guerra.

La medida se produce después de que el presidente admitiera que Israel se había “excedido” en su respuesta en Gaza. Desde 1950, Israel ha recibido más ayuda militar estadounidense que cualquier otra nación. En el memorando, el presidente Biden dijo que los gobiernos extranjeros que reciben armas estadounidenses deben proporcionar “garantías escritas, creíbles y confiables” a Estados Unidos para garantizar que se utilicen de acuerdo con el Derecho Internacional.

Como parte de esto, los gobiernos extranjeros también deben brindar garantías de que la ayuda humanitaria estadounidense se entrega a las poblaciones civiles atrapadas en un conflicto. El memorando exige que esta información se comparta periódicamente con el Congreso, así como con el presidente de Estados Unidos.

El plazo del Gobierno de Joe Biden finaliza el 18 de abril. Si Venezuela no se abre a las elecciones libres, tomará duras acciones. | Foto: 2024 Getty Images

Los 100 países que reciben armas estadounidenses deben firmar las garantías en los próximos 180 días. Pero aquellos involucrados en conflictos activos, incluido Israel, tienen solo 45 días para responder a la orden. Si surge un problema, se debe implementar un plan para remediar la situación, afirma el memorando, que deja el lugar a la suspensión de ayuda militar.

“Dicha remediación podría incluir acciones que van desde actualizar las garantías hasta suspender cualquier transferencia adicional de artículos de defensa o, según corresponda, servicios de defensa”, dice. Washington envía alrededor de 3.800 millones de dólares (3.000 millones de libras esterlinas) en ayuda militar a Israel cada año, lo que convierte al país en el mayor receptor de dicha financiación del mundo.

Si bien los funcionarios de la administración dijeron a los periodistas en una sesión informativa el jueves que la orden no estaba dirigida a ningún país en particular, se produce después de que destacados legisladores demócratas expresaron su preocupación por la campaña militar de Israel en Gaza y si se ha adherido al Derecho Internacional.

Una unidad de soldados israelíes regresa con sus tanques al lado israelí de la frontera con la Franja de Gaza. | Foto: AFP or licensors

La campaña militar de Israel fue motivada por un ataque de Hamas el 7 de octubre en territorio israelí que mató a 1.300 personas, según funcionarios israelíes. Otras 250 personas fueron tomadas como rehenes. Desde la ofensiva de represalia de Israel, más de 27.800 palestinos han muerto y al menos 67.000 han resultado heridos, según el Ministerio de Salud dirigido por Hamás.

Imágenes aéreas de Gaza muestran que al menos la mitad de los edificios del territorio asediado han resultado dañados o destruidos. Alrededor de 1,7 millones de personas (más del 80 % de la población de Gaza) están desplazadas.

El flujo de ayuda a la población civil de Gaza también se ha visto significativamente limitado desde el inicio de la guerra en octubre, y los funcionarios de la ONU advirtieron repetidamente que muchos corren el riesgo de sufrir hambruna.

Palestinos inspeccionan el lugar de un ataque israelí contra una mezquita, en medio del conflicto en curso entre Israel y el grupo islamista palestino Hamas, en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 24 de enero de 2024. | Foto: Restringido

En una rueda de prensa el jueves, el mandatario estadounidense mostró sus reparos acerca de lo que ha sido la guerra en Oriente Medio. “Mi opinión es que la respuesta en Gaza, en la Franja de Gaza, ha sido excesiva”, declaró el mandatario a la prensa en la Casa Blanca. “Hay mucha gente inocente pasando hambre, mucha gente inocente pasándolo mal y muriendo, y esto tiene que parar”, manifestó.

El Ejército israelí ha intensificado sus ataques en Rafah, y Washington advirtió a su aliado histórico del riesgo de un “desastre” en esta ciudad del sur de la Franja de Gaza, donde se han concentrado cientos de miles de desplazados del territorio. La Casa Blanca añadió que no apoyaría operaciones importantes sin la debida consideración hacia los refugiados allí.