Estados Unidos pide “la liberación inmediata” del obispo Rolando Álvarez, condenado a 26 años de prisión en Nicaragua, afirmó este lunes un portavoz del Departamento de Estado, que afirma que la excarcelación de 222 presos opositores “no fue una panacea”.

“Condenamos esta acción del gobierno de Nicaragua y pedimos la liberación inmediata del obispo Álvarez”, afirmó Ned Price, cuatro días después de que el prelado rechazara irse a Estados Unidos con otros 222 opositores excarcelados y expulsados del país.

Un tribunal condenó al obispo a 26 años y cuatro meses de cárcel y al pago de una multa de 1.600 dolares, además de privarle de su nacionalidad nicaragüense y de sus derechos ciudadanos a perpetuidad.

La semana pasada “dejamos muy claro” que la liberación de esos presos políticos “es un paso bienvenido, fue un paso constructivo, pero de ninguna manera fue una panacea para las muchas preocupaciones que tenemos respecto al régimen” del mandatario Daniel Ortega, “incluyendo la represión y opresión que sigue ejerciendo contra su propio pueblo”, insisió Price.

El régimen de Daniel Ortega ha llevado a cabo una persecución contra los miembros de la iglesia católica en su país. | Foto: © 2019 Bloomberg Finance LP

Centenares de opositores fueron detenidos en Nicaragua en el contexto de la represión que siguió a las protestas que estallaron en 2018 contra Ortega, en el poder desde 2007 y reelegido sucesivamente en elecciones puestas en entredicho.

“Seguimos pidiendo la liberación de las personas encarceladas en Nicaragua por ejercer sus libertades fundamentales y seguimos firmes en alentar al gobierno a restaurar las libertades civiles y la democracia para el pueblo nicaragüense”, añadió Price este lunes.

El viernes, un día después de la excarcelación y deportación de los opositores, privados de sus derechos políticos y despojados de su nacionalidad, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, habló por teléfono con su homólogo nicaragüense Denis Moncada sobre “la importancia del diálogo constructivo”. El gobierno de Ortega se ve sometido a fuertes presiones de la comunidad internacional y a sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea (UE).

El pontífice se mostró preocupado por la persecución que vive la iglesia católica en Nicaragua. | Foto: Foto. AFP y Domenico Stinellis/ AP

La reacción del papa

Esta noticia llega después de que el papa Francisco dijo el domingo estar “preocupado” y “entristecido” por la situación en Nicaragua, especialmente por el obispo Rolando Álvarez, condenado a 26 años de cárcel, y por la deportación de 222 opositores a Estados Unidos.

El obispo Rolando Álvarez, que se negó a ser deportado, fue condenado a 26 años de cárcel por, entre otros cargos, menoscabo a la integridad nacional. “Las noticias que llegan de Nicaragua me han entristecido mucho”, dijo el pontífice argentino al final de su tradicional oración del Ángelus, en la plaza de San Pedro.

“No puedo dejar de recordar con preocupación al obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, a quien quiero tanto”, agregó, y “también a las personas que han sido deportadas a Estados Unidos”. Francisco dijo rezar por todos ellos y “por quienes sufren en esa querida nación”.

Un manifestante participa en una protesta frente a la prisión "La Modelo" para exigir la liberación de los presos políticos en Tipitapa, Nicaragua, el 19 de junio de 2019. | Foto: REUTERS

Además, instó a los responsables políticos a seguir la senda de “la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor, y se alcanza mediante el ejercicio paciente del diálogo”.

Entre los 222 opositores nicaragüenses excarcelados figuran la exprecandidata presidencial Cristiana Chamorro y su hermano y exministro Pedro Joaquín Chamorro, así como otros políticos que pretendían desafiar a Ortega en los últimos comicios.

También fueron liberados y expulsados a Estados Unidos otros dos integrantes de la familia Chamorro ligados al diario La Prensa, que ahora se edita en internet en el exilio, y la excomandante guerrillera Dora María Téllez. El jueves, al anunciar la medida, Ortega dijo que el obispo de Matagalpa, de 56 años y detenido desde agosto por conspiración, rechazó marcharse a Estados Unidos con el grupo de excarcelados.

El presidente indicó que una decena de sacerdotes, diáconos y seminaristas abordó voluntariamente el vuelo que llevó a 222 opositores excarcelados y que ahora sólo quedan tres religiosos presos en Nicaragua: dos sacerdotes “por delitos comunes” y el obispo por “terrorismo”.

Con información de AFP.