Este 28 de febrero se cumple el quinto día de los ataques de Rusia contra Ucrania, en el marco de una invasión que ha rechazado casi todo Occidente, especialmente los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan).

En las últimas horas, el panorama del conflicto ha cambiado radicalmente con varios factores rondando en la discusión pública: el primero es la negociación que se inició en Bielorrusia, país garante en donde se han reunido representantes del Gobierno ucraniano, así como de su igual ruso, para tratar de dar fin a este conflicto desde el diálogo y no desde las armas.

Sin embargo, en segundo lugar, se encuentra el anuncio del presidente de Rusia, Vladimir Putin, quien en la tarde del pasado domingo anunció que puso en alerta a las “fuerzas de disuasión” nucleares que tienen a su servicio las Fuerzas Militares lideradas por el Kremlin (Gobierno ruso).

“Ordeno al ministro de Defensa y al jefe del Estado Mayor que pongan las fuerzas de disuasión del ejército ruso en alerta especial de combate”, fue la orden dada por Putin, a lo que el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, dijo, sin titubear: “Afirmativo”.

Esta situación ha hecho que detone aún con más fuerza el tercer factor del cual se habla este lunes: el incremento de los bloqueos y demás sanciones económicas que la Otan ha instaurado para intentar disminuir el espíritu ruso y que, de esta manera, Putin tenga que ir dando un paso atrás en su invasión sobre Ucrania.

Ejemplo de esto es la decisión que tomó Estados Unidos (uno de los países más poderosos dentro de la Otan) de prohibir, desde este 28 de febrero, cualquier transacción con el Banco Central de Rusia.

La decisión fue notificada por el Departamento del Tesoro de ese país, y considerada por varios expertos como una sanción sin precedente alguno en la enemistad que ha mantenido durante varios años el país norteamericano con Rusia.

Asimismo, esta entidad explicó que la sanción no es solo propia de Estados Unidos, sino que se efectuó tras discutirlo con varios de sus aliados, llegando a la conclusión de que sería una buena opción para intentar disminuir al Kremlin en su avanzada por Ucrania.

“Esta decisión tiene el efecto de inmovilizar todos los activos que el Banco Central de Rusia tiene en Estados Unidos o en manos de personas estadounidenses”, informa un comunicado oficial.

Cabe recordar que esta decisión también fue tomada el domingo por los cancilleres de la Unión Europea (UE), según informó el jefe de la diplomacia de esta organización internacional, Josep Borrell.

De acuerdo con el funcionario europeo, “más de la mitad de las reservas del Banco Central ruso serán paralizadas, ya que son mantenidas en establecimientos en países del G7″.

Asimismo, por medio de una reunión virtual los cancilleres llegaron a la conclusión de que algunos de los bancos más importantes de Rusia también deberían ser excluidos del Swift, un sistema interbancario internacional que, hoy en día, es considerado como una de las herramientas más importantes para las operaciones financieras en todo el planeta.

De esta manera, la UE responde en parte al clamor que desde hace días Ucrania ha venido haciendo para que todo el sistema bancario ruso sea expulsado de la red Swift, asegurando que, aunque no puede bloquear del todo el sistema financiero del gigante euroasiático, sí pondrá en jaque a un selecto grupo bancario de esa nación.

Por ser una noticia de interés mundial, todo el contenido sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania será de libre acceso para nuestros lectores en todas las plataformas digitales de SEMANA. Siga el minuto a minuto de lo que está ocurriendo.