Estados Unidos hará un “puente aéreo” para importar leche en polvo para bebés. La llevará en aviones comerciales fletados por las fuerzas armadas, con el fin de suplir la escasez de ese producto, dijo la Casa Blanca en un comunicado.

La escasez, que es el resultado de problemas en la cadena de suministros y de los retiros masivos del producto tras el cierre de una planta productora, está generando desesperación entre los padres. Con ello, se ha convertido en una pesadilla política para el presidente Joe Biden, a medida que se acercan las elecciones legislativas de noviembre.

El departamento de Defensa “usará sus contratos con las aerolíneas de carga, como lo hizo para mover materiales durante los primeros meses de la pandemia de la covid, para transportar productos desde fábricas en otros países que cumplen los estándares de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA)”, dijo la Casa Blanca.

“La conexión aérea por medio de rutas regulares acelerará la importación y distribución de la leche en polvo y servirá de apoyo inmediato mientras los fabricantes continúan incrementando la producción”, anunció.

Además, la entidad confirmó que se redoblan los esfuerzos para la operación aérea. Biden también mencionó la ley de producción de defensa para darles prioridad de suministros a los fabricantes del producto para bebés.

“Indicar a las empresas que prioricen y asignen la producción de este producto clave para los bebés ayudará a incrementar la producción y acelerará las cadenas de suministro”, añadió la Casa Blanca.

Inicialmente causada por los bloqueos de suministro y la escasez de mano de obra, el déficit de leche en polvo se acentuó en febrero de este año cuando, tras la muerte de dos infantes, el fabricante Abbot anunció el “retiro voluntario” de su fórmula para bebés fabricada en sus instalaciones en Michigan.

La investigación de la FDA esclareció el hecho y alcanzó un acuerdo con Abott para retomar la producción, pero tomará semanas llevar el esencial producto a los almacenes. Biden les escribió entonces a los jefes de los departamentos de Agricultura y de Salud que las importaciones de la fórmula en polvo “servirán como puente a la aceleración de la producción”.

“Sin embargo, les pido que tomen todas las medidas apropiadas disponibles para contar con cantidades adicionales de fórmula segura en el país, de forma inmediata”, expresó el mandatario en su carta.

La escasez ha dejado a muchos padres frenéticos y temerosos de que sus hijos pasen hambre. La leche en polvo es una necesidad de muchas familias, en particular aquellas de bajos recursos en los que las madres deben volver al trabajo casi inmediatamente después de dar a luz y no pueden amamantar. Un problema más es que los precios del producto disponible subieron y están por las nubes.

La desesperación de los padres se nota en las redes sociales, donde publicaciones compartidas cientos de miles de veces urgen a los padres a hacer el producto en casa, algo desaconsejado por los expertos que dicen que esto no tendrá los nutrientes necesarios para los niños y podría ponerlos enfermos.

Esto ya tiene consecuencias políticas con la oposición republicana, que tiene la mirada puesta en recuperar el control del Congreso en las elecciones de noviembre, aprovechando el tema para atacar a Biden y los demócratas.

Estados Unidos depende en 98 % de su producción local de la leche en polvo para bebés. La tasa promedio de desabastecimiento del producto llegó al 43 % al inicio de este mes, de acuerdo con Datasembly, que recogió información de más de 11.000 vendedores.

*Con información de AFP.