El primer ministro conservador británico, Rishi Sunak, muy por debajo en las encuestas frente a su rival laborista de cara a los comicios del 4 de julio, prometió este martes bajar los impuestos al presentar su programa electoral.
“Los conservadores tenemos un plan para brindarles seguridad financiera. Estamos reduciendo los impuestos”, señaló en la presentación de su programa en Silverstone, sede del Gran Premio de Gran Bretaña de Fórmula 1, a unos 100 km al norte de Londres.
Sunak, según las últimas encuestas, cosecha un 20% de intención de voto, muy lejos de Keir Starmer y los laboristas, que llegan a una cota del 45% en esos sondeos.
Además, Sunak tiene la amenaza del partido de extrema derecha Reform UK, de uno de los impulsores del Brexit, el eurófobo Nigel Farage, que se posiciona en tercer lugar en las encuestas, con un 15% de intención de voto, muy cerca de los conservadores.
Desde el inicio de la campaña, los conservadores prometieron recortes fiscales adicionales y acusaron a la oposición laborista, encabezada por Starmer, de querer aumentar la carga fiscal sobre los hogares.
“Sabemos lo que siempre hacen los laboristas, toman una buena parte de vuestro dinero porque piensan que les pertenece”, dijo el martes Sunak.
“Elegir cómo gastar el dinero”
El líder conservador insistió en la promesa de que los ciudadanos conservarán “una gran parte del dinero que ganen para tener el derecho de elegir cómo gastarlo”.
Sunak anunció que para rebajar los impuestos tomará medidas enérgicas contra los pagos de asistencia social para las personas en edad de trabajar.
La presentación del programa de los Tories, que llevan catorce años en el poder, llega un día después de que Sunak rechazara dimitir como primer ministro tras las críticas por su ausencia en algunos actos conmemorativos del Desembarco de Normandía, afirmando que seguirá su campaña electoral.
“No voy a parar”, “No voy a dejar de luchar por el futuro de nuestro país”, aseguró el jefe del Gobierno conservador.
El dirigente de 44 años, que llegó al poder a finales de 2022, pidió disculpas el viernes, reconociendo su “error” por haber acortado su asistencia a los actos por el 80º aniversario del desembarco de Normandía para grabar una entrevista televisiva.
El aumento del costo de la vida y las luchas intestinas en el bando conservador, que ha visto a cinco primeros ministros sucederse desde el referéndum sobre el Brexit en 2016, pueden poner fin a catorce años de gobierno en las elecciones del 4 de julio.
Problema de la vivienda
En una entrevista concedida el lunes a la BBC, Rishi Sunak admitió que en la actualidad es “más difícil” convertirse en propietario de una vivienda y prometió medidas para remediar esta situación.
“Vamos a proponer medidas para quienes compran una propiedad por primera vez”, afirmó, por su parte, el ministro de Trabajo, del gobierno conservador, Mel Stride, a la cadena de televisión Sky News.
Algunos analistas políticos, críticos con los gobiernos conservadores, señalan, sin embargo, que se han alcanzado niveles récord de construcción de viviendas y altas tasas hipotecarias con los Tories, atribuidos a la promesa de recortes de impuestos no financiados de la efímera predecesora de Sunak, Liz Truss.
“Ser propietario de una casa hace que la gente esté más segura económicamente, les da una participación en la sociedad y, como dijo la (ex primera ministra) señora Thatcher, es uno de los principales baluartes de la libertad individual”, escribió Sunak en el periódico Daily Telegraph.
Sunak señaló en la presentación de su programa que reducirá “a la mitad” el número de inmigrantes irregulares en el país.
El Partido Laborista debe anunciar su programa el jueves, aunque Starmer calificó las medidas anunciadas el martes por Sunak como “una receta para cinco años más de caos”.
*Con información de AFP.