Sudáfrica, uno de los países del mundo más castigados por el VIH, empezará a probar un nuevo método de prevención ante este virus con un anillo vaginal que difunde un medicamento antirretroviral, dijo el viernes el Fondo Mundial contra el Sida.
Tres organizaciones implicadas en la lucha contra el sida en Sudáfrica encargaron 16.000 anillos que deben estar disponibles en pocos meses, según el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y el Paludismo.
Inspirado en los modelos utilizados para la anticoncepción femenina, este anillo vaginal de silicona difunde progresivamente un antirretroviral, la dapivirina, y debe cambiarse cada mes.
“Estamos convencidos de que este nuevo anillo puede tener un impacto revolucionario en la prevención del VIH”, el virus de inmunodeficiencia humana que destruye las defensas inmunitarias y provoca el sida, explica en un comunicado el director de este fondo, Peter Sands.
El anillo constituye una alternativa a otros tratamientos preventivos, como la profilaxis de prexposición (PrEP), que revolucionó la lucha contra el virus del sida en los últimos años.
Este tratamiento implica tomar una pastilla diaria o recibir una inyección mensual, un método que no necesariamente se adapta a todas las personas destinatarias, explican las organizaciones de prevención sudafricanas.
“Las mujeres necesitan tener acceso a un abanico de soluciones seguras y eficaces, entre ellas el anillo de dapivirina, para que puedan adoptar la que mejor les convenga”, dice Ntombenhle Mkhize, presidenta de la Fundación Sida de Sudáfrica.
En 2023, las mujeres y chicas adolescentes contabilizaron un 53% de las infecciones en el mundo, según ONUSIDA, el programa específico de Naciones Unidas sobre esta enfermedad.
Sudáfrica cuenta con un 13,7% de seropositivos, en lo que representa una de las tasas más elevadas del mundo de infectados por VIH.
Pero más de 5,4 millones sobre una estimación total de 8,2 millones de personas afectadas toman antirretrovirales. Es uno de los programas más importantes de tratamiento del VIH en el mundo y ha permitido reducir espectacularmente la mortalidad.
Recientes ensayos clínicos mostraron que el anillo vaginal de dapivirina, un dispositivo que ha recibido la luz verde de la Organización Mundial de la Salud, permite reducir en un 35% el riesgo de seroconversión (pasar de ser seronegativo a seropositivo).
“Esperamos que muchos otros países sigan los pasos de Sudáfrica”, dijo Peter Sands.
El dispositivo también ha sido aprobado y se encuentra en fase de estudio para su lanzamiento en Uganda, Kenia y Zimbabue.
La ONU dice que “el fin del sida” todavía es posible para 2030
“El fin del sida” todavía es posible para 2030, afirmó este jueves la ONU, aunque advirtió que la falta de financiamiento frena el avance de los progresos.
La hoja de ruta presentada en un nuevo informe de ONUSIDA “muestra que el éxito todavía es posible en esta década”, dijo la directora ejecutiva de este programa, Winnie Byanyima.
Acabar con el sida es una decisión política y financiera, según ONUSIDA, que articula iniciativas a escala mundial para terminar con esta epidemia de aquí a 2030, en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles adoptados en 2015 por la ONU.
La organización llamó a luchar contra las desigualdades, apoyar a las comunidades y las organizaciones de la sociedad civil y garantizar un financiamiento que sea adecuado y sostenido.
Byanyima destacó que los mayores progresos se registraron en los países y las regiones que más invirtieron financieramente, citando el caso del este de África y la zona austral de este continente, donde los contagios bajaron 57% desde 2010.
Botsuana, Suazilandia, Ruanda, Tanzania y Zimbabue lograron los objetivos bautizados como “95-95-95″.
Esto quiere decir que un 95% de las personas que viven con VIH conocen su estado, un 95% de éstas están en tratamiento y un 95% de las personas tratadas registra una supresión de la carga viral, lo que implica que ya no pueden trasmitir el virus.
*Con información de AFP.