Un grupo de científicos confirmó que se identificaron los primeros casos de lepra en chimpancés salvajes en África. Esta revelación se publicó en un estudio de la revista especializada Nature, el pasado 13 de octubre.

Según reseñó la agencia de noticias DW en Español, los animales infectados fueron hallados en dos grupos diferentes en África Occidental, en Guinea-Bisáu y en Costa de Marfil, sin que existiera alguna relación entre ellos.

Los investigadores tuvieron resultados asombrosos: descubrieron que los dos grupos de primates estudiados habían sido afectados por esta enfermedad con dos cepas de lepra, ambas poco comunes entre los seres humanos.

La autora principal del estudio, Kimberley Hockings, del Centro de Ecología y Conservación del Campus Penryn de Exeter, en Cornualles (Inglaterra), difundió los resultados en su cuenta de Twitter y a través de un hilo explicó que se trata del primer caso confirmado de lepra en animales no humanos en África.

“Es sorprendente que la enfermedad se dé también en nuestro pariente vivo más cercano, el chimpancé, sobre todo teniendo en cuenta lo bien estudiados que están los chimpancés en la naturaleza”, agregó la investigadora.

Los orígenes de este contagio de la lepra a los chimpancés no están claros. No obstante, los expertos sospechan que la lepra, producida por la bacteria Mycobacterium leprae, podría estar circulando entre otras especies de animales salvajes —como armadillos o ardillas—, ya sea por contacto con humanos o por otras causas desconocidas.

Sobre este planteamiento, Hockings, escribió desde Twitter: “Una vez se pensó que era un patógeno humano obligado, ahora sabemos que la lepra circula en los armadillos en las Américas y en las ardillas en el Reino Unido”.

DW en Español citó a Charlotte Avanzi, de la Universidad Estatal de Colorado, en Estados Unidos, quien explicó que las cepas identificadas en cada población de chimpancés son diferentes, y ambas son raras en los seres humanos y en otras reservas de animales de todo el mundo.

“Este estudio abre un nuevo paso hacia la comprensión de la transmisión de la enfermedad en los países endémicos y más investigaciones acabarán por arrojar luz sobre la dinámica de la transmisión entre fuentes humanas, animales y ambientales”, añadió.

Los científicos explicaron que en la Costa de Marfil los chimpancés están más alejados de los asentamientos humanos. Sin embargo, existe una pequeña posibilidad de que hayan adquirido la enfermedad tras el contacto con otra especie.

En el caso de Guinea Bisáu —aclaró Hockings— “es probable que los chimpancés hayan adquirido de alguna manera la lepra de los humanos en este paisaje compartido, aunque la gente no mate ni coma chimpancés”.

La lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por Mycobacterium leprae, un bacilo acidorresistente con forma de curva. Afecta principalmente la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos. Es una enfermedad curable en humanos, con tratamientos rigurosos. No obstante, los efectos o impactos que podría tener en los chimpancés son desconocidos, según los autores del estudio de Nature.

La investigadora Kimberley Hockings advirtió que los chimpancés occidentales están en peligro crítico de extinción, “por lo que incluso la pérdida de unos pocos individuos podría ser muy significativa”.