En momentos en los que la vacunación contra la covid-19 es un éxito, con más de 235 millones de dosis administradas a lo largo de todo Estados Unidos, CNN informó que mañana el presidente Joe Biden dará vía libre para que las personas que hayan recibido las dos dosis puedan circular en lugares abiertos sin necesidad de usar tapabocas.
De ser así, esta nueva medida se hará efectiva a medida que el porcentaje de estadounidenses vacunados se acerque al 30 %.
Además, como ya se espera que el clima cambie y las altas temperaturas comiencen a extenderse por todo el país, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) empezaron a ampliar lentamente la lista de actividades que, según esta agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, son de bajo riesgo para las personas completamente vacunadas.
Hasta ahora Biden se había negado a emitir un mandato con respecto al uso de los tapabocas. Sus asesores en salud pública, incluido Anthony Fauci, le advirtieron que imponerlo podría tener el efecto contrario, avivando la resistencia de los ciudadanos a taparse la cara todo el tiempo.
Lo que sí está comprobado es que el uso del tapabocas realmente disminuye los contagios, hospitalizaciones y muertes por covid-19. Un ejemplo de ello es lo ocurrido en Kansas: el 3 de julio del año pasado, cuando se presentaron contagios masivos en el sur del estado, su gobernadora, Laura Kelly, emitió un mandato de uso obligatorio de tapabocas y la tendencia al alza se estabilizó.
Además, según un estudio de los CDC de Kansas, los nuevos casos de covid disminuyeron en un 6 % en las ciudades que adoptaron el mandato de Kelly, mientras que aquellos que optaron por no acatar la medida presentaron cifras alarmantes: el doble de nuevas infecciones.
Casi el 29 % de los estadounidenses está completamente vacunado contra el coronavirus, y más del 42 % ha recibido al menos una dosis. Entre los adultos de 18 años o más, las tasas son aún más altas, con un 36,5 % completamente vacunado y un 53,6 % que ha recibido al menos una primera dosis, según datos de los CDC.
Esta posibilidad de ser más laxos con el uso del tapabocas se presenta a pesar de que en los ensayos clínicos para las tres vacunas autorizadas en EE. UU. –realizados por Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson– no se midió si las personas vacunadas pueden transmitir el virus. Por esto, los funcionarios de salud pública insisten en que las personas completamente vacunadas deben seguir usando el tapabocas.
De otro lado, un estudio reciente del Instituto de Tecnología de Massachusetts ha demostrado que es muy raro que se propague el coronavirus al aire libre, contrario a lo que sucede en el interior de una casa o establecimiento, en los que, si no existe una buena ventilación, el riesgo sigue siendo alto.
Para complementar estas afirmaciones, existe una investigación previa publicada en el Journal of Infectious Diseases, en la que se revela que el coronavirus tiene casi 19 % más de probabilidades de propagarse en interiores que en exteriores.
Incluso el mismo Fauci admitió durante una entrevista en ABC, el pasado domingo, que existe poco riesgo de transmisión al aire libre: “Si usted está vacunado y usa una máscara al aire libre, obviamente es improbable que se contagie”.
Sin embargo, la iniciativa no elimina totalmente el uso de esta norma de bioseguridad. Aún es importante su uso en espacios públicos donde haya personas que no han sido vacunadas y que tengan alto riesgo de contagio y comorbilidades. Asimismo, se deberá seguir manteniendo el distanciamiento social.
Al no hacerlo, pueden aumentar las tasas de contagio y de fallecimientos, ocasionando que se retrase la meta de llegar a la inmunidad de rebaño.