A pesar del incremento de contagios que se ha registrado en los Estados Unidos en los últimos días, con la llegada de la variante ómicron, hay quienes se oponen a recibir la vacuna contra la enfermedad que ya deja más de 5,4 millones de muertes en el mundo.

Esto no solo ocurre entre la población civil, sino también entre las fuerzas armadas, por lo que, según Axios, 206 marinos estadounidenses fueron apartados de sus cargos por oponerse a recibir el biológico.

El 21 de diciembre, el Departamento de Defensa de Estados Unidos había lanzado la advertencia que los integrantes de la armada tenía que vacunarse “o se enfrentarían a las consecuencias”.

Al respecto, el organismo destacó que el 98 % de los integrantes de la fuerza estaba vacunado, aunque hay un pequeño grupo de soldados que no permite el pinchazo.

Entre las consecuencias que habían advertido, estaba la imposibilidad de seguir con su entrenamiento hasta la suspensión de sus pagos e incluso el despido.

Así mismo, se han reportado 3.200 peticiones para ser eximidos de la vacunación por razones religiosas, pero ninguna fue aceptada.

Los soldados que no quisieron recibir una vacuna argumentan que se trata de una suerte de purga política encabezada por la administración del presidente Joe Biden.

En un diálogo anónimo con Fox News, militares de diversos rangos aseguran que obligarlos a vacunarse es inconstitucional y que tiene como consecuencia la pérdida de buenos soldados.

Dicen sobre las vacunas que “todo mundo tiene derecho a opinar excepto la milicia, porque no estamos autorizados a oponernos a nuestros líderes”.

OMS puso un límite para tener vacunada al 70 % de la población global

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha hecho un llamamiento a los países y ha marcado principios de julio de 2022 como fecha límite para tener vacunada al 70 por ciento de la población global.

“Quiero que los gobiernos, la industria y la sociedad civil trabajen con nosotros en una campaña que tenga como objetivo una cobertura de vacunas del 70 % en todos los países para esta fecha”, aseguró el líder del organismo sanitario de las Naciones Unidas en rueda de prensa este miércoles.

En concreto, se ha referido “a los líderes de los países ricos” y a los fabricantes “para que aprendan las lecciones de Alfa, Beta, Gamma, Delta y ahora ómicron” y trabajen juntos para alcanzar tal objetivo. “Este es el momento de superar el nacionalismo a corto plazo y proteger a las poblaciones y las economías contra futuras variantes, poniendo fin a la desigualdad mundial en materia de vacunas”, ha resaltado.

Con todo, ha lamentado que no se ha alcanzado el objetivo propuesto por la OMS de llegar a finales de 2021 con el 40 % de la población mundial vacunada.

“92 estados miembros, de 194, no alcanzaron el objetivo del 40 %, que era factible. Esto se debe a una combinación de suministro limitado que va a los países de bajos ingresos durante la mayor parte del año y a que las vacunas llegan cerca de la caducidad y sin piezas clave como las jeringas”, criticó Tedros, que ha calificado este hecho como “vergüenza moral”.

Asimismo, Tedros también ha apuntalado su objetivo de garantizar que los nuevos tratamientos para hacer frente a la covid-19 “estén disponibles en todos los países” en 2022. “Y para garantizar que las personas se pongan en tratamiento en el momento óptimo, tenemos que conseguir pruebas en todas partes”, aseguró el director general de la OMS.

“Acabar con la inequidad sanitaria sigue siendo la clave para terminar con la pandemia”, aseguró para advertir que, a medida que esta pandemia se prolonga, “es posible que nuevas variantes evadan las medidas y se vuelvan totalmente resistentes a las vacunas actuales o a la infección anterior”. Esto requerirá adaptaciones de las vacunas, tal y como ha insistido.

“Cualquier nueva actualización de la vacuna significaría potencialmente una nueva escasez de suministro, por lo que es importante que nos centremos en aumentar el suministro de fabricación local para ayudar a acabar con esta pandemia y prepararnos para las futuras”, señaló Tedros.

Con todo, el director general de la OMS se ha mostrado optimista, ya que, a su juicio, 2022 “puede ser el año en que no solo se termine con la etapa aguda de la pandemia, sino en el que también se trace un camino hacia una seguridad sanitaria más fuerte”.