La familia de Kevin García Turriago, un joven colombiano de 24 años, está enfrentando una situación devastadora mientras buscan respuestas y justicia después de su trágica muerte en Chiapas, México. La petición de ayuda al Ministerio de Relaciones Exteriores colombiano para repatriar su cuerpo refleja el dolor y la angustia que están experimentando mientras intentan comprender lo que sucedió.
Kevin, oriundo del municipio de Galapa en el departamento del Atlántico, tomó la decisión de buscar mejores oportunidades en México en abril de 2023, esperando encontrar un futuro más prometedor que el que le ofrecía su país natal. Durante meses, trabajó arduamente recolectando mangos para una distribuidora de frutas en la localidad de Tapachulas, luchando por alcanzar sus metas y aspiraciones en tierras extranjeras.
La noticia repentina de su fallecimiento, comunicada por su expareja en México el martes 27 de febrero, sumió a su familia en un profundo estado de shock y desesperación. La versión inicial sugirió la posibilidad de un suicidio, pero esta explicación planteada por la pareja de Kevin no encajaba del todo con la información proporcionada por su propio hermano, Jeisson García Turriago, quien también estaba en México en ese momento sostiene que Kevin falleció el lunes por la noche, lo que contradice el relato de la expareja.
Las circunstancias desconcertantes en torno a la muerte de Kevin García han dejado a su familia llena de incertidumbre y angustia. Aunque el hermano tiene dudas sobre la posibilidad de que su hermano haya decidido quitarse la vida, su prioridad principal en este momento es repatriar su cuerpo para darle un último adiós en su tierra natal.
La causa del fallecimiento, según se informa en el acta de defunción, fue una insuficiencia renal, pero esta explicación no ha logrado disipar las preocupaciones y las preguntas sin respuesta que atormentan a la familia, que piden una respuesta clara sobre la muerte de su ser querido.
En medio de su dolor, la familia García busca consuelo en su fe y en el apoyo de sus seres queridos. “Dejamos todo en manos de Dios. No hay ley más sagrada que la suya”, expresó el hermano del fallecido. En este momento de profunda tristeza, su única solicitud es la repatriación del cuerpo de Kevin, un deseo que consideran esencial para poder honrar adecuadamente su memoria y comenzar el proceso de duelo y sanación.
Mientras esperan respuestas y se preparan para enfrentar los desafíos legales y emocionales que les esperan, la familia de Kevin García busca solidaridad y comprensión en su lucha por la justicia y la verdad. Todo con miras de poder repatriar el cuerpo del joven y poder darle el último adiós en su tierra y junto a aquellos que más quiere. Todo esto después de la trágica muerte en tierras aztecas.