Mariela y su familia, oriundos de Argentina, viven actualmente una pesadilla por cuenta del asesinato de su mascota Roma, una cerdita a la cual criaron por dos años pero que, por cuestiones de espacio, no podían cuidarla.
De acuerdo con lo dicho por Fernando Pieroni, presidente de la fundación Planeta Vivo, al periódico La Nación, la familia adquirió a Roma para criarla en su casa como una mascota más. Sin embargo, dos años después, la cerdita creció tanto que no podían mantenerla en óptimas condiciones, por lo que decidieron llevarla a un lugar para cuidarla mejor.
La familia contactó a un hombre por Internet, quien les dijo que él contaba con el espacio para tener la mascota, ya que tenía una granja donde, además, estaban otros animales de compañía.
Mariela y su familia recibió fotos del lugar y puso toda su confianza en el hombre y, tras varias conversaciones, decidieron llevar a Roma a vivir a ese lugar.
El hombre compartió luego una fotografía en sus redes sociales junto a Roma en su carro, lo que le dio confianza a la familia.
Días después, recibieron fotos y videos de Roma compartiendo con los demás animales y ellos pensaron que todo estaba en orden.
Poco después, la familia se enteró, a través de la fundación protectora de animales, que el hombre que había prometido proteger a Roma la entregó a otra persona, quien la asesinó y preparó un plato de comida con ella.
Ante la angustia, decidieron contactarse con el hombre quien, luego de ser insistentes, les confirmó que “la chancha había pasado a mejor vida”.
Tras denunciarlo en redes sociales, la familia ha recibido amenazas, por lo que decidieron demandarlo y están a la espera de la decisión de los jueces.
“Nos dijo que está todo en manos de sus abogados y que no es más que una operación informática contra él, pese a que subió la selfie con Roma y él mismo le dijo que carneo a la chancha”, dijo el abogado al periódico argentino.
Mujer creyó que compraba un mini pig, pero terminó siendo un cerdo de más de 250 kilos
Tremenda sorpresa se llevó una mujer en Brasil luego de que su mascota, la cual había comprado pensado que era un mini pig, con el paso de los años se convirtió en una cerdita de 250 kilos.
La mujer, de nombre Rosangela dos Santos Lara, de 50 años de edad, contó que compró a Lilica en un mercado brasileño donde le aseguraron que estaba adquiriendo un pequeño cerdito mini pig.
“La compré pensando que sería una cerdita, pero se convirtió en un animal gigante”, contó la mujer a medios locales.
De acuerdo con la mujer, a pesar de su gran tamaño, el animal es un miembro más de su familia y, además, consume gran parte del ajustado presupuesto del hogar.
Respecto a su alimentación, indicó que come al menos cinco kilos de frutas y verduras, más alimento para animales, aunque dijo no interesarle porque según ella Lilica le trajo alegría a su vida.
A pesar de su peso, el animal duerme en un colchón dentro del dormitorio que la docente comparte con su esposo Nelson, un pescador desempleado en la ciudad costera brasileña de Peruibe.
Rosangela dos Santos Lara, de profesión maestra, también contó que el tamaño de Lilica a llevado a que algunas personas le hayan ofrecido dinero para sacrificarla y que su carne sea utilizada para consumo humano. No obstante, recalcó no estar interesada en venderla y menos para que la maten.