Un grupo de familiares de personas que permanecen secuestradas en la Franja de Gaza han cortado este jueves una autopista en Tel Aviv para pedir al Gobierno de Benjamin Netanyahu que anteponga la vida de los rehenes y no ordene el asalto a gran escala sobre la ciudad de Rafah.
“Entre Rafah y los rehenes, elige la vida”, reza la pancarta que estos familiares han exhibido en la barricada, tras la que se han acumulado cientos de vehículos incapaces de seguir. El grupo considera que la operación prometida por Netanyahu implica “abandonar la vida de los rehenes” y, por tanto, cree que la única forma de “salvarlos” pasa por un acuerdo con Hamás.
Asimismo, le han pedido al primer ministro que no ceda a “la presión de los extremistas”, que “utilizan a los rehenes como una excusa para seguir con la guerra”, según un comunicado recogido por el diario ‘Times of Israel’ y que carga contra figuras como el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, o el de Finanzas, Bezalel Smotrich.
Netanyahu afirmó esta semana, precisamente ante varios familiares de personas secuestradas, que el Ejército israelí entraría en Rafah “con o sin acuerdo”, dando a entender que no renunciaría a esta potencial ofensiva, aunque llegase a algún tipo de pacto con Hamás a corto plazo.
Ascienden a 35.000 los muertos en Gaza por la ofensiva militar de Israel
La cifra de fallecidos en la Franja de Gaza como consecuencia de la ofensiva militar lanzada por Israel asciende ya a casi 35.000, según el último balance divulgado este jueves por el Ministerio de Sanidad gazatí.
El Gobierno de Gaza, controlado por Hamás, tiene constancia en las últimas 24 horas de tres nuevas “masacres” atribuidas a las fuerzas israelíes y que han dejado al menos 28 víctimas mortales, lo que eleva el dato provisional de fallecidos a 34.596. Además, más de 77.800 personas han sufrido heridas.
Las autoridades de la Franja advierten, no obstante, de que se trata de estadísticas provisionales, ya que aún quedarían víctimas bajo los escombros o en zonas inaccesibles para los servicios de emergencia.
Israel inició la ofensiva como respuesta a los atentados del 7 de octubre, que se saldaron con unas 1.200 víctimas mortales y alrededor de 240 secuestrados. Las partes mantienen negociaciones indirectas para un posible alto el fuego, pero las posiciones parecen alejadas.
Cerca de 1,74 millones de palestinos podrían caer bajo el umbral de la pobreza
La tasa de pobreza en los Territorios Palestinos Ocupados sigue aumentando a medida que la ofensiva israelí contra Gaza se acerca a su séptimo mes, por lo que otros 1,74 millones de palestinos podrían caer bajo el umbral de la pobreza durante los próximos meses, según datos del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En un informe publicado este jueves junto a la Comisión Económica y Social para Asia Occidental (CESPAO), el PNUD ha alertado además de la fuerte caída del PIB en estos territorios, donde se ha registrado una pérdida del 26,9 por ciento --unos 7.100 millones de dólares-- respecto a datos recabados en 2023, antes del inicio de la guerra.
“Cada día adicional que dura esta guerra supone un coste enorme y creciente para los gazatíes y todos los palestinos, ahora y a medio y largo plazo. En comparación con nuestra evaluación preliminar, estas nuevas cifras advierten de que el sufrimiento en Gaza no terminará cuando termine la guerra”, ha lamentado el administrador del PNUD, Achim Steiner.
“Los niveles sin precedentes de pérdidas humanas, la destrucción de capital y el fuerte aumento de la pobreza en un periodo de tiempo tan corto precipitarán una grave crisis de desarrollo que pone en peligro el futuro de las generaciones venideras”, ha aseverado.
El documento, titulado ‘La guerra de Gaza: impactos socioeconómicos previstos en el Estado de Palestina’, aborda el impacto de la guerra durante los últimos seis meses y presenta diversas proyecciones de cara al futuro en caso de que la ofensiva se prolongue al menos durante tres meses más.
Así, en caso de que la guerra dure nueve meses, se estima que la pobreza aumente hasta el 60,7 por ciento, 2,25 veces los niveles existentes antes de la guerra. Esto supone otros 1,86 millones de personas bajo el umbral de la pobreza y una disminución del PIB del 29%, con unas pérdidas totales de 7.600 millones de dólares.
En este sentido, el documento apunta a un retroceso en materia de desarrollo a niveles previos a 2004, cuando se calculó por primera vez el Índice de Desarrollo Humano (IDH) en los Territorios Palestinos Ocupados.