La Oficina Federal de Investigación (FBI) estadounidense participará en la investigación de la devastadora explosión ocurrida la semana pasada en Beirut, por invitación del Líbano, anunció este jueves el subsecretario de Asuntos Políticos de EE. UU., David Hale, durante una visita a la ciudad donde recientemente un estallido en el puerto provocó más de 170 muertos y 6.000 heridos. "El FBI pronto se unirá a los investigadores libaneses e internacionales con el fin de ayudar a responder las preguntas que todo el mundo se hace sobre las circunstancias que llevaron a esta explosión", afirmó Hale, quien fue embajador en ese país entre 2013 y 2015.
El subsecretario de Estado de Asuntos Políticos de Estados Unidos, David Hale (izq.), Escucha a un voluntario de una ONG durante su visita cerca del lugar de la explosión de la semana pasadaque afectó al puerto marítimo de Beirut, en la capital libanesa, el 13 de agosto de 2020. Hussein Malla / PISCINA / AFP.
"Esta es una de las muchas formas en las que Washington va a ayudar al Líbano tras el estallido de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio que llevaban seis años almacenadas en el puerto de Beirut", agregó el enviado estadounidense. Hale, quien se dirigió a la prensa después de recorrer el barrio de Gemmayze, uno de los más afectados por la deflagración, dijo que durante su visita, que se prolongará hasta el sábado, se reunirá con políticos y autoridades, pero también con miembros de la sociedad civil y líderes religiosos. Además, invitó a los libaneses a seguir trabajando juntos con el objetivo de "hacer las reformas necesarias para traer la transformación" que necesita el país y abogó por "el final de gobiernos disfuncionales y de promesas incumplidas".
"Estamos verdaderamente en vías de restaurar lo que, creo, todos los libaneses quieren ver, que es un Líbano dirigido por el pueblo libanés y satisfacer sus ambiciones y necesidades, no las de otros", añadió. La tragedia de Beirut provocó la dimisión en bloque del Gobierno del primer ministro Hasan Diab y también salpicó al presidente libanés, Michel Aoun, quien ayer aceptó conocer la presencia de "gran cantidad" de nitrato de amonio en el puerto de Beirut dos semanas antes de la explosión.