El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió el miércoles 4 de octubre inscribir el aborto en la Constitución “lo antes posible”, entre otras reformas de la carta magna con motivo de su aniversario número 65.
Las dos cámaras del Parlamento francés ya dieron su visto bueno y lo único que hace falta es que alcancen un acuerdo sobre si inscribirlo como un “derecho”, como aprobó la Asamblea, o una “libertad”, como quiere el Senado.
Macron, que habló de la “libertad” de las mujeres a abortar, llamó a reanudar las discusiones para lograr un acuerdo “lo antes posible” y reunir así a ambas cámaras conjuntamente para la aprobación final.
El mandatario centrista expresó este deseo durante un discurso ante el Consejo Constitucional porque se cumplen 65 años de la Constitución de 1958, impulsada por el general Charles de Gaulle.
Francia despenalizó el aborto en 1975 con una ley promovida por Simone Veil, ícono de la emancipación femenina y superviviente del Holocausto. En 2022, extendió los plazos hasta las 14 semanas.
La anulación del derecho al aborto a nivel nacional en Estados Unidos por la Corte Suprema en junio de 2022 conmocionó al mundo y, en Francia, se tradujo en el anuncio de iniciativas políticas para blindarlo.
Macron busca incluir el aborto pero no cambiar la Constitución
En un contexto en que varias fuerzas políticas, sobre todo en la izquierda, piden un proceso constituyente que dé nacimiento a una nueva carta magna, Macron defendió la actual, aunque se dijo abierto a algunos cambios.
El mandatario abogó así por simplificar la convocatoria de referendos y ampliar su alcance a temas como la inmigración, como pide la derecha y la ultraderecha, aunque subrayó el respeto del “Estado de derecho”.
Y prometió una “nueva etapa de descentralización” territorial, citando además las discusiones en curso en Nueva Caledonia, en el Pacífico Sur, y en Córcega, en el Mediterráneo.
Estados Unidos, por el contrario, solo un estado da la pelea por el aborto legal en el país
Por primera vez desde el fin del derecho al aborto en Estados Unidos, el máximo tribunal de un estado del país norteamericano garantizó el derecho al aborto de sus habitantes en virtud de la constitución local, lo que sus defensores consideraron una “victoria”.
El más alto tribunal de Carolina del Sur anuló una ley que prohibía el aborto después de las seis semanas de embarazo. “Sostenemos que nuestro derecho constitucional estatal a la privacidad se extiende a la decisión de una mujer de abortar”, decía. Un razonamiento similar utilizó la Corte Suprema de Estados Unidos en 1973 en su sentencia Roe contra Wade para defender el derecho de las mujeres estadounidenses a abortar.
“Esto es una victoria monumental para la protección del aborto legal en el sur”, declaró Planned Parenthood, que gestiona numerosas clínicas abortistas. Esto abre nuevas oportunidades para las mujeres de la región que no tienen acceso al aborto, especialmente en los estados de Alabama y Tennessee.
Aunque no es necesariamente el final de la guerra. En su decisión, la corte de Carolina del Sur dictaminó que el derecho a la vida privada puede “limitarse” siempre que se haga de forma “razonable”, lo que podría permitir a legisladores locales introducir nuevas restricciones.
*Con información de AFP.