Los franceses votan masivamente este domingo, 7 de julio, en la segunda vuelta de unas elecciones legislativas decisivas para su futuro, en las que la extrema derecha podría convertirse por primera vez en el primer partido e incluso alcanzar el gobierno.

La tasa de participación a las 17H00 (15H00 GMT) se situaba en 59,71 %, convirtiéndose en la más alta registrada en unas legislativas desde las de 1981 (61,4 %), que llevaron a la izquierda al poder, según cifras divulgadas por el Ministerio del Interior.

La primera vuelta de la semana pasada registraba hasta las 17.00 una asistencia del 59,39 %. En las últimas horas ha depositado su voto el presidente de Francia, Emmanuel Macron, acompañado de su mujer, Brigitte, en su correspondiente circunscripción de Touquet, en el Paso de Calais.

El partido de extrema derecha de Marine Le Pen puede cambiar el rumbo del país en las elecciones que se desarrollan en Francia. | Foto: Getty Images/AFP

Los casi 50 millones de electores se enfrentan a un dilema: ¿votar al partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN) o por el “frente republicano” tejido por el oficialismo y la izquierda?

“Estamos en un punto de inflexión en la historia” del país, aseguró a la AFP Antoine Schrameck, un pensionista de 72 años, mientras votaba en Rosheim, a las afueras de la Estrasburgo.

El presidente de centroderecha Emmanuel Macron conmocionó a Francia con el adelanto de estas elecciones, previstas en 2027, a raíz de la victoria del partido de la ultraderechista Marine Le Pen en los comicios europeos del 9 de junio.

Aunque su objetivo era pedir una “aclaración” política a los franceses y, a su vez, frenar a la extrema derecha, el resultado de la primera vuelta puso a RN en cabeza con un tercio de votos y las proyecciones apuntaban incluso a una eventual mayoría absoluta.

Pero, tras la primera vuelta, la coalición de izquierda Nuevo Frente Popular (NFP) y la alianza de centroderecha Juntos del presidente Macron tejieron más de 200 pactos locales implícitos, el llamado “frente republicano”, retirando al candidato menos votado para impedir una victoria arrolladora de Le Pen y sus aliados.

Las últimas proyecciones de dos institutos de sondeos alejan al bloque ultraderechista de la mayoría de 289 de los 577 escaños de la Asamblea Nacional (cámara baja), al obtener entre 170 y 210, seguidos del NFP (155 a 185) y la alianza oficialista (95 a 125).

Semana decisiva en Francia de cara a la segunda vuelta de las elecciones legislativas. | Foto: Restringido

Artistas, futbolistas y asociaciones, entre otros, llamaron también a impedir la victoria de RN, en un movimiento similar al de 2002, cuando Jean-Marie Le Pen, padre de Marine, accedió por primera vez al balotaje de una elección presidencial y perdió.

“Más que nunca, hay que ir a votar. Es realmente urgente. No podemos dejar el país en las manos de esa gente”, dijo el jueves el capitán de la selección francesa de fútbol, Kylian Mbappé, llamando a votar “del lado bueno”.

De visita en la ciudad italiana de Trieste, el papa Francisco advirtió el domingo contra las “tentaciones ideológicas y populistas”, sin mencionar a ningún país en particular.

Escenarios

Las primeras estimaciones se conocerán a partir de las 20H00 (18H00 GMT), cuando cierren los colegios electorales, tras una campaña marcada por los insultos y agresiones a candidatos y simpatizantes, y por una retórica racista y antisemita.

Ante eventuales “desórdenes”, a menos de tres semanas de los Juegos Olímpicos de París, las autoridades desplegarán 30.000 policías y gendarmes el domingo por la noche.

Los analistas advierten de un resultado incierto, que dependerá de la abstención. La participación en la primera vuelta fue casi 20 puntos superior que en 2022.

Los manifestantes que se encuentran en el Monumento a la República encienden bengalas mientras participan en una manifestación después del anuncio de los resultados de la primera vuelta de las elecciones parlamentarias francesas, en la Place de la Republique en París el 30 de junio de 2024. Habiendo salido claramente En cabeza en la primera vuelta de las elecciones legislativas, la Asamblea Nacional (RN) y sus aliados podrían obtener una amplia mayoría relativa en la Asamblea Nacional, o incluso una mayoría absoluta, según las proyecciones de tres institutos electorales, que predicen entre 240 y 310 asientos. (Photo by Geoffroy VAN DER HASSELT / AFP) | Foto: AFP or licensors

Si ningún bloque obtiene una mayoría absoluta, varias hipótesis emergen: una difícil coalición entre parte de la izquierda, el oficialismo y los diputados de derecha que no pactaron con RN, o incluso un gobierno tecnócrata con apoyo parlamentario.

El primer ministro de centroderecha, Gabriel Attal, anunció que su gobierno está dispuesto a permanecer en funciones “el tiempo que sea necesario” para garantizar la continuidad del Estado.

Independientemente del resultado, Francia vive un momento crucial de su historia política. Este podría acelerar el fin del “macronismo”, ciclo iniciado en 2017 con la irrupción de Macron por el centro del espectro político. Su mandato termina en 2027.

Una mayoría absoluta de RN llevaría a su joven estrella Jordan Bardella, de 28 años, al cargo de primer ministro del primer gobierno ultraderechista en Francia desde la Liberación de la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.

Su victoria en la segunda economía de la Unión Europea y potencia nuclear podría debilitar la influencia de Francia en Bruselas, donde ha sido uno de los principales motores de la integración europea, y socavar la política de apoyo a Ucrania.

Y sumaría un nuevo gobierno con ultraderechistas en Europa: en Italia, la posfascista Giorgia Meloni es primera ministra, y en otros como Finlandia, Eslovaquia y Países Bajos forman parte del ejecutivo.

*Con información de AFP y Europa Press.