El presidente de Brasil Jair Bolsonaro y el exmandatario de ese país Luiz Inácio Lula da Silva cruzaban ataques la noche del domingo 16 de octubre en su primer debate cara a cara, en el que intentan sacarse ventaja a 14 días del balotaje decisivo en las presidenciales de Brasil.
En el inicio del programa realizado en São Paulo, el mandatario ultraderechista y el líder de izquierda se acusaron mutuamente de mentirle a la sociedad brasileña. “Lula pare de mentir, es malo para un hombre de su edad”, le dijo Bolsonaro, de 67 años, a su rival, de 76.
“Usted es el rey de las fake news, el rey de la estupidez”, le respondió Lula, quien acusó duramente a Bolsonaro por su gestión de la pandemia. “Su negligencia hizo que 680.000 personas murieran cuando se podría haber salvado la mitad”, dijo Lula.
Ambos candidatos, vestidos con traje oscuro y corbata (verde para Bolsonaro y los colores de Brasil para Lula), se interpelaron uno junto al otro de pie, caminando por el escenario, sin cruzar miradas.
El debate es una instancia clave para conquistar a los electores indecisos, según analistas, en medio de una campaña de fuertes ataques entre los candidatos y desde sus entornos, incluyendo acusaciones de canibalismo o vínculos con el crimen organizado.
En la primera vuelta del 2 de octubre, Lula se impuso con el 48,4 % de los votos, contra 43,2 % de Bolsonaro, quien tuvo un mejor resultado de lo anticipado por los sondeos.
De cara al balotaje, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) marcha como favorito, con el 49 % de las intenciones de voto, a cinco puntos porcentuales de Bolsonaro, quien tiene 44 % de los apoyos, según una encuesta del Instituto Datafolha difundida el viernes 14 de octubre.
Un 93 % de los consultados indicó ya haber definido su voto, mientras que 6 % dijo que votará en blanco o nulo y 2 % se manifestó indeciso.
Acusaciones cruzadas
Bolsonaro dijo al llegar al estudio de televisión en São Paulo que las últimas 24 horas fueron “las más terribles” de su vida, luego de que el entorno del líder izquierdista lo acusara de “pedofilia”, tras la viralización de declaraciones sobre menores venezolanas.
Lula sostuvo por su parte que “de Bolsonaro se espera todo” y lo acusó de actuar con “mala fe” con las adolescentes.
El sábado, Bolsonaro fue centro de críticas opositoras por declaraciones en las que, al referirse a la migración desde Venezuela, indicaba haber entrado a la casa de menores venezolanas en un barrio vulnerable en abril de 2021 en Brasilia tras generarse “un clima”.
El partido de Lula difundió las imágenes en sus redes este domingo.
Bolsonaro había repudiado horas antes las críticas y aclaró que ingresó en la vivienda junto a “otras 10 personas”, con transmisión “por CNN”. “El PT traspasó todos los límites”, dijo, indignado.
Tras un pedido de los abogados del presidente, el Tribunal Superior Electoral (TSE) mandó retirar el video con las declaraciones de múltiples plataformas, por considerar que constituye una “propaganda electoral negativa”.
Días atrás, Bolsonaro acusó a Lula de “borracho” y circuló información falsa (fogueada incluso por uno de los hijos del presidente), que asoció al izquierdista al crimen organizado tras usar una gorra con siglas de un complejo de favelas de Río de Janeiro.
Christopher Mendonca, doctor en Ciencia Política, anticipó “un debate acalorado, con muy pocas informaciones sobre planes de gobierno”, dado que “las propuestas perdieron centralidad y ganaron lugar las acusaciones”.
Lula avanza hacia el balotaje con el respaldo de la excandidata y senadora Simone Tebet y del expostulante centroizquierdista Ciro Gomes, que cosecharon 4 % y 3 %, respectivamente, en la primera vuelta.
En tanto, Bolsonaro cuenta con apoyos clave de electores de mayores ingresos y evangélicos.
*Con información de AFP.