Mientras los organismos de socorro continúan con sus arduas jornadas de búsqueda tras los estragos que han generado las fuertes lluvias en el estado de Pernambuco y con mayor intensidad en el área metropolitana de Recife, aumentan los registros de fallecidos, mientras que ya se logró determinar el número de personas desaparecidas por el momento.

El último reporte de las autoridades afirmaron que hasta este martes 31 de mayo 100 personas han muerto por las precipitaciones, mientras que son 14 los ciudadanos que todavía continúan desaparecidos.

“Son 100 muertos confirmados en el estado de Pernambuco debido a deslizamientos y lluvias registradas desde el pasado miércoles”, indicaron en un comunicado desde la Secretaría de Defensa Social del gobierno pernambucano, agregando que se había logrado identificar a las 14 personas desaparecidas.

Según informaron las autoridades locales, una de las zonas más afectadas en Recife es el barrio Jardim Monteverde, en el que residen personas de escasos recursos y que habría sido arrastrada por un tsunami de barro, como lo calificaron las propias víctimas, donde un deslizamiento soterró el sábado casas enteras y provocó la muerte de 19 personas.

Nada más hasta el domingo había 4.000 personas afectadas por las lluvias que habían quedado sin hogar; sin embargo, las nuevas cifras de este martes indican que la cifra aumento a 6 mil los vulnerados que quedaron sin techo.

Por el momento, se ha decretado la emergencia en 24 municipios de la región y más de 400 bomberos estarían atendiendo los eventos en conjunto con perros detectores para la búsqueda de sobrevivientes o víctimas, así como aeronaves para la búsqueda aérea.

Es de recordar que el presidente brasileño Jair Bolsonaro sobrevoló la región el lunes y lamentó las muertes. Su gobierno habilitó un crédito de 1.000 millones de reales (unos US$212 millones al cambio) para reforzar la asistencia humanitaria y reconstrucción, a cargo de las autoridades locales.

Las lluvias empezaron a mediados de la semana pasada, pero se intensificaron el fin de semana. Entre la noche del viernes y la mañana del sábado, el volumen de lluvias alcanzó el 70 % de lo esperado para todo el mes de mayo en algunos puntos de la capital.

Los estragos de lluvias en Brasil este año comenzaron desde febrero, cuando en Petrópolis, en el estado de Río de Janeiro, donde murieron 233 personas tras las precipitaciones torrenciales y deslaves. Sin mencionar las emergencias vividas a finales de 2021 que aumentaron más las cifras de víctimas.

Los expertos atribuyen este tipo de tragedias a una combinación de fuertes lluvias –exacerbadas por el cambio climático– y a la construcción de grandes barriadas con viviendas precarias en escarpadas zonas de riesgo.

“Pero no puede ser culpado de que gobiernos permitan construir en áreas de riesgo o de que la población pobre no tenga a dónde ir y deba construir y vivir en áreas vulnerables”, añadió el especialista.

Por otro lado, la meteoróloga Estael Sias, de la agencia MetSul, explicó a la AFP que las intensas lluvias que afectan a Pernambuco y, en menor medida, a otros cuatro estados del nordeste del país, son producto de un fenómeno típico de esta época, las llamadas “ondas del este”, áreas de “perturbación atmosférica” que se desplazan desde el continente africano hasta esa región litoral brasileña.

El Cemaden calcula que en Brasil 9,5 millones de personas viven en áreas de riesgo por deslizamiento o inundación, muchas de ellas en favelas –barriadas pobres–, sin estructuras de saneamiento básico.

*Con información de la AFP.