El presidente de Chile, Gabriel Boric, visitó este miércoles 15 de marzo la pequeña localidad fronteriza de Colchane (norte) y aseguró que junto a otros gobernantes “amigos” de la región sostendrán una reunión para abordar el tema de la migración irregular.
“Vamos a tener una reunión con diferentes presidentes amigos de América Latina, con AMLO (Andrés Manuel López Obrador, de México), Alberto Fernández (de Argentina), Xiomara Castro (Honduras), con Gustavo Petro (Colombia), Luis Arce (Bolivia), en donde uno de los temas que vamos a tratar es justamente este”, de la migración, afirmó Boric.
La oficina de prensa de la Presidencia chilena precisó que la reunión se efectuará en el marco de la XXVIII Cumbre Iberoamericana que se llevará a cabo en Santo Domingo, República Dominicana, el 25 de marzo próximo.
El mandatario habló desde la región norteña de Tarapacá, por donde ingresa a Chile una parte importante de los migrantes en situación de irregularidad, especialmente venezolanos y colombianos.
Desde hace tres semanas el Gobierno desplegó efectivos de las Fuerzas Armadas en las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta, en la zona norte de Chile, para reforzar el control fronterizo.
Reclamo a Bolivia
En una entrevista con una radio local de la ciudad de Iquique (1.800 km al norte de Santiago), el mandatario explicó que muchos de los migrantes irregulares que ingresan al país llegan desde Bolivia y no pueden ser devueltos porque ese país no los recibe.
En Bolivia “están aceptando solamente a ciudadanos bolivianos”, añadió el presidente al señalar que el objetivo era reconducir a los migrantes irregulares de vuelta al mismo país desde donde llegaron. “Eso requiere una conversación diplomática de alto nivel. Yo estoy comenzando esas gestiones con el presidente Arce, para que a nivel de América Latina podamos enfrentar esto”, declaró.
Más tarde, en la localidad de Colchane, en la frontera con Bolivia, Boric afirmó que le pidió a su canciller Alberto van Klaveren que refuerce las conversaciones con los países vecinos, incluido Bolivia, para lograr una política común para abordar la situación de los migrantes.
Los países fronterizos “hoy día no están llevando adelante la reconducción de los ciudadanos venezolanos y colombianos que entran por la frontera de Colchane y que no son recibidos por el lugar donde entran (Bolivia) y eso tenemos que solucionarlo”, aseguró el mandatario.
La Cancillería boliviana, por medio de su viceministro, Freddy Mamani, respondió desde La Paz que “el procedimiento de reconducción al que ser refiere el presidente Boric es normativa chilena que no genera ningún tipo de obligación internacional”.
Respecto a los migrantes que entran a Chile, Bolivia señaló que es un tema que Santiago lo debe resolver con las autoridades de los países de origen, “evitando una estigmatización negativa” que “vulnere sus derechos humanos”.
En la breve declaración de prensa, Mamani manifestó que La Paz está dispuesta a dialogar con las autoridades de La Moneda.
Colchane, punto de ingreso
La localidad chilena de Colchane, a dos kilómetros de la frontera con Bolivia, tiene una población de 1.680 habitantes. Según datos oficiales, por ese paso ingresaron en 2022 a Chile 21.553 personas desde Bolivia en situación irregular.
Por este motivo, Boric, junto con anunciar mayores recursos humanos y logísticos para el control de esa frontera, dijo que los habitantes de Colchane “han tenido que experimentar durante los últimos años con mayor intensidad los efectos del ingreso masivo e irregular de personas”.
“En su mayoría llegan a nuestro país buscando oportunidades que no encuentran su lugar de origen. (...) Desgraciadamente, algunos de ellos también vienen con un ánimo de delinquir. (...) Esas personas que vienen a delinquir no son bienvenidas. Las vamos a perseguir y le vamos a hacer, dentro del Estado de derecho, la vida imposible”, afirmó.
*Con información de la AFP.