México aseguró que la cooperación con Estados Unidos ha permitido reducir los homicidios en un 9,2 %, así como decomisar decenas de miles de armas y toneladas de drogas, en una reunión en Washington con el gobierno de Joe Biden, que prometió ser “implacable” contra el contrabando de armas.
Los dos países vecinos mantuvieron un diálogo de alto nivel para hacer un balance sobre el Entendimiento Bicentenario sobre seguridad, adoptado en octubre de 2021.
“El indicador más importante es que por primera vez en los últimos años tenemos una reducción de los homicidios en México de 9,2 %, también de los secuestros y los robos”, dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en rueda de prensa conjunta por la tarde con su homólogo Antony Blinken y varios ministros.
La caída en los homicidios se vio favorecida por el decomiso de 32 mil armas, especificó. Son “17 millones de cartuchos y cada cartucho de esos puede matar a alguien en México”, afirmó por la mañana.
El gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, libra una guerra judicial contra las armas que entran ilegalmente a su país desde Estados Unidos. Esta semana ha presentado una segunda demanda contra empresas que las venden después de que un tribunal desestimara una primera, lucha que Estados Unidos afirma apoyar porque las armas ilegales “alimentan a los carteles que trafican drogas y migrantes hacia el país”, afirmó en la rueda de prensa el secretario estadounidense de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas.
Estados Unidos aumentó en un 500 % sus investigaciones sobre el tráfico de armas y ha incautado cientos de armas desde octubre de 2021, añadió. Según Mayorkas los dos países han acordado crear un grupo de trabajo para desarrollar nuevas estrategias “y evaluar y determinar qué más podemos hacer para contrarrestar este problema”. “Seremos implacables en nuestro ataque”, dijo.
Entre los logros de la cooperación bilateral en seguridad, México también destaca la incautación de cinco toneladas de sustancias y precursores químicos, incluyendo fentanilo, 154 toneladas de metanfetaminas y 94 toneladas de cocaína. “Es casi como si le diéramos una dosis de metanfetaminas a cada persona en México de más de 50 años”, puso como ejemplo Ebrard.
Estados Unidos se muestra satisfecho con el camino recorrido, pero estima que queda “mucho trabajo por hacer”, en palabras de Antony Blinken. “Necesitamos mejorar nuestros esfuerzos para interrumpir la producción y el tráfico ilícito de fentanilo y de opioides sintéticos” porque el año pasado unas 108 mil personas murieron en Estados Unidos por sobredosis, estimó.
El encuentro de alto nivel se celebró pocas horas después de que Estados Unidos y México anunciaran haber acordado un nuevo programa migratorio para los venezolanos en medio de una gran crisis en la frontera común por la llegada de un aluvión de migrantes.
En virtud de este pacto Estados Unidos aceptó la entrada de hasta 24 mil migrantes venezolanos por avión, mediante una vía legal similar a la aplicada a los ucranianos, y expulsará a aquellos que entren ilegalmente por su frontera con México.
El programa, según afirmó Mayorkas, se basa en un principio central del gobierno de Biden: la “responsabilidad de construir caminos seguros, legales y humanos que creen oportunidades” para aquellas personas que están tan desesperadas por abandonar su país que “ponen los ahorros de toda su vida y sus vidas en manos de traficantes que los explotan con fines lucrativos”.
Con información de AFP.