Durante las últimas horas, más de 2.3 millones de palestinos se han enfrentado a desabastecimientos de productos alimenticios y medicinas debido a la contraofensiva israelí para presionar a Hamás de desistir en la guerra entre las milicias islámicas y el Ejército hebreo iniciada en pasado 7 de octubre luego de un ataque terrorista en donde los miembros de Hamás asesinaron a más de 260 personas inicialmente.
Además de cortar los suministros de energía y combustible al enclave palestino, desde el gobierno israelí, a la cabeza de Benjamín Netanyahu, se recomendó a los civiles palestinos alejarse de los objetivos militares en la Franja de Gaza, como edificios y demás estructuras, en donde se estaban escondiendo algunos miembros de Hamás. De hecho, Netanyahu también indicó que, en lo posible, evacuaran toda la zona.
Tras la ausencia de alimentos y medicinas, el gobierno de Egipto propuso un corredor humanitario en Gaza, con el fin de contrarrestar los efectos de la guerra en la Franja, no obstante, el grupo islamista Hamás lo rechazó, debido a que “obligaría al pueblo palestino a abandonar su patria”, además de representar buscar un nuevo refugio, citó Antena3.
Las exigencias de Hamás
Luego de la puesta en marcha del corte de energía eléctrica que había anunciado Israel con anterioridad, la Franja de Gaza ha quedado a oscuras durante dos noches seguidas, en medio de las presiones hacia Hamás para desestabilizar las acciones bélicas de este grupo hacia Israel.
No obstante, esto no le ha impedido a los terroristas seguir lanzando cohetes hacia poblaciones civiles hacia el sur de la nación hebrea, exigiendo, además, “el acceso de suministros y bienes esenciales como combustible o electricidad, todo lo que garantice”, a los civiles palestinos “el derecho a la vida”.
Por otro lado, en un comunicado del grupo terrorista, Hamás se refirió puntualmente al presunto corredor humanitario que se daría mediante Egipto, sin embargo, la agrupación extremista fue tajante al mostrar su negativa frente a tal propuesta ya que “abrir un paso seguro para obligar a nuestro pueblo a abandonar su patria y sufrir una muerte permanente, no es algo con lo que nuestro pueblo y nuestra resistencia estén de acuerdo”.
Tanta es la presión que recae sobre la crisis humanitaria en Gaza, que el Comité de la Cruz Roja, y en general la comunidad internacional, ha recibido el llamado del Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (con sede en Cisjordania), buscando una intervención inmediata para solventar a la población gazatí de alimentos y medicinas, a través de una petición argumentando que “el gran número de heridos actualmente excede la capacidad de los hospitales en la Franja de Gaza”, y añadiendo que se levanten” hospitales de campaña para trabajar y salvar vidas de heridos, especialmente mujeres, niños y ancianos”.
Israel no desiste en su contraataque hacia Hamás
El estado de guerra en Israel en su sexto día de vigencia, donde se ha presentado una escalada de violencia dentro de la nación, y en sus fronteras, que no se había visto desde 1973 en el marco de la Guerra del Yom-Kippur.
Para asegurar la frontera entre el enclave palestino, sitiado por Hamás, e Israel, el gobierno hebreo rechazó establecer una ‘zona tapón’ para atender a los heridos que huyen de los bombardeos, aseveraron las autoridades de seguridad de Egipto. No obstante, los gobiernos de El Cairo y Washington mantienen conversaciones para buscar una ruta que permita el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza, a pesar del rechazo de Hamás.
Aunque las autoridades egipcias han aseverado que el paso de Rafa, (frontera entre Gaza y el Sinaí egipcio) está “abierto al tráfico y nunca ha sido cerrado”, los servicios de seguridad egipcios confirmaron a la agencia DPA que este paso se encuentra cerrado por los bombardeos israelíes en la zona.