Jimmy Morales, el cómico, actor y neófito, asume el jueves la presidencia de Guatemala y deberá lidiar con una sociedad cansada de actos de corrupción y de su clase política. El nuevo presidente iniciará su mandato en medio de la expectativa de la población que espera que no solamente ponga fin a la corrupción, sino que también responda a sus necesidades urgentes y cumpla las promesas de campaña que hizo. Antes de la toma de posesión, Morales se reunirá con el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, quien tendrá un encuentro sobre temas de migración con los presidentes del triángulo norte de Centroamérica, que incluye El Salvador, Honduras y Guatemala. Posteriormente, el presidente del congreso unicameral guatemalteco juramentará al nuevo mandatario. El ex vicepresidente Eduardo Stein (2004-2007) dijo a periodistas que Morales deberá enfocarse en hacer cambios para la transparencia y "deberá escuchar a la población". En breves entrevistas con medios radiales Morales dijo: "Estoy feliz. Que Dios nos dé la sabiduría y el valor para dirigir Guatemala". Morales es el octavo presidente civil elegidoo al concluir en 1996 los 36 años de una cruel y sangrienta guerra en el país.