Las Fuerzas Armadas rusas activaron este jueves sus sistemas de defensa antiaérea en varios puntos de la península de Crimea, lo que ha derivado en nuevas explosiones que han hecho temer una nueva escalada de tensiones en esta zona.
Un asesor ruso confirmó la activación de los sistemas antiaéreos en Kerch, de donde parte un puente de 18 kilómetros de largo que une Crimea con la Federación Rusa. Kiev ha defendido que este puente es un objetivo legítimo del ataque.
“No hay peligro para la ciudad y para el puente”, aclaró el funcionario prorruso Oleg Kriuchkov, en un mensaje recogido por la agencia de noticias Interfax.
También se han activado las alertas a las afueras de la ciudad de Sebastopol, en el aeródromo de Belbek. Las fuerzas rusas han derribado en esta zona un dron, según el gobernador de Sebastopol, Mijail Razvozhaev.
Zelenski descarta hacer un acuerdo de paz con Rusia mientras haya tropas en Ucrania
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, abordó este jueves en Leópolis con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, y el secretario general de la ONU, António Guterres, la posibilidad de una solución diplomática a la guerra, aunque ha vuelto a dejar claro que no negociará hasta que Rusia no saque a todas sus tropas de suelo ucraniano.
Zelenski, quien inicialmente recibió por separado a sus dos invitados, coincide con ellos en que es posible un diálogo, pero por ahora no hay indicio alguno de que este vaya a llegar a corto plazo, a pesar del acuerdo para la exportación del grano en el que Turquía y la ONU ejercieron de mediadores.
Guterres espera que este pacto entre Kiev y Moscú sea “solo el principio”, por lo que abogó por seguir con este “espíritu de compromiso” para avanzar. “El hito positivo en el frente alimentario refleja una victoria de la diplomacia”, dijo en una comparecencia pública, según la agencia DPA.
En esta misma línea, Erdogan apuntó que durante el encuentro tripartito se han evaluado las opciones de transformar esta “atmósfera positiva” en “una paz permanente”, para lo cual se ofreció de nuevo como mediador. Estambul ya fue sede en marzo de los contactos de más nivel hasta la fecha, sin resultados prácticos.
“Lo importante es encontrar el camino más corto y más justo a la mesa de negociaciones”, aseguró el mandatario turco, en unas declaraciones recogidas por la agencia oficial Anatolia y que avanzan también que Erdogan expondrá próximamente antes Moscú las conclusiones de la reunión de este jueves.
Los tres dirigentes comparten su preocupación por las crecientes tensiones en torno a la central nuclear de Zaporiyia, donde autoridades rusas y ucranianas anticipan una posible “provocación” del bando rival. Guterres ha insistido en que cualquier ataque sobre estas instalaciones sería “suicida”.
Erdogan llamó a evitar “un nuevo Chernóbil”, en alusión al desastre nuclear de 1986. El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ha pedido acceso a la zona y tanto Zelenski como Guterres han solicitado la retirada de las tropas rusas.
En días pasados, Zelenski pidió a los países de América Latina que rompan cualquier romper relaciones con Rusia y se sumen a las sanciones adoptadas por Estados Unidos y la Unión Europea.
“Lo que nos importa a nosotros es que los países de América Latina sepan la verdad y compartan nuestra verdad”, dijo el mandatario durante un discurso ante la Pontificia Universidad Católica de Chile, apenas unos días después de que su homólogo ruso, Vladimir Putin, ofreciera armas a los países de la región.
Zelenski confió en sumar apoyos en distintas partes del planeta para que la política de sanciones “sea más eficaz” y los rusos asuman que deben pagar “un alto precio” por la ofensiva militar iniciada en febrero.
*Con información de Europa Press
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