Un alto responsable taiwanés encargado de un programa de producción de misiles murió el sábado de una crisis cardíaca en un hotel, indicó el instituto donde trabajaba, en momentos en que China lleva a cabo los mayores ejercicios militares de su historia en torno a la isla.

Uyang Li-hsing, de 57 años, era el vicepresidente del Instituto nacional Chung-Shan de ciencias y tecnologías, un organismo del ejército. Según la agencia taiwanesa CNA, viajó al sur del país por negocios.

En un comunicado publicado en su sitio internet, el instituto confirmó que el responsable fue hallado inconsciente el sábado en un hotel de Hengchun, en el condado de Pingtung.

“Un examen médico-legal determinó que la causa del fallecimiento fue un infarto de miocardio y una angina de pecho”, según el comunicado.

Según CNA, Uyang estaba encargado de supervisar “la producción de varios tipos de misiles” y había asumido su cargo este mismo año.

El gobierno taiwanés se esfuerza en acelerar su producción de misiles ante la amenaza de una invasión por parte de China, que considera la isla como parte de su territorio.

China lleva a cabo gigantescas maniobras militares en torno a Taiwán en represalia por la visita a la isla esta semana de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.

Taiwán acusa a China de simular una invasión de la isla

Taiwán acusó al ejército chino de simular el sábado un ataque a su isla principal, mientras Pekin redobló sus represalias por la visita de la legisladora estadounidense Nancy Pelosi a Taipéi, al suspender su cooperación con Estados Unidos en temas clave.

Las relaciones entre las dos superpotencias cayeron en picada tras la visita de Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes, a la isla de gobierno autónomo que China considera parte de su territorio.

El medio ambiente se convirtió en la última víctima de la batalla geopolítica, cuando Pekín dijo que se retiraría de las conversaciones y acuerdos de cooperación con Washington, particularmente sobre cambio climático y cooperación en defensa.

Ambos países, los mayores contaminadores del mundo, se habían comprometido a trabajar juntos para acelerar la acción climática y a reunirse regularmente para enfrentar esa crisis, pero el acuerdo ahora parece incierto.

Pekín continuó el sábado con algunos de sus mayores ejercicios militares alrededor de Taiwán, dirigidos a practicar un bloqueo e invasión de la isla, según analistas.

Taiwán acusó el sábado a China de simular un ataque a su isla principal.

Las fuerzas de Taipéi “detectaron múltiples tandas de aviones y barcos comunistas realizando actividades alrededor del Estrecho de Taiwán (...). Se consideró que realizaban un simulacro de ataque a la isla principal de Taiwán”, indicó el ministerio de Defensa taiwanés en un comunicado.

“En las aguas alrededor de la isla de Taiwán, más de 10 destructores y escoltas de la marina del Comando Oriental se acercaron desde diferentes direcciones para realizar operaciones de contención”, dijo el Comando Oriental del ejército chino en un comunicado sobre las maniobras.

En la noche, las fuerzas chinas divulgaron un video de un piloto que grabó la línea costera y montañas de la isla desde su cabina, una muestra de cuánto se acercaron las fuerzas chinas a Taiwán.

El Comando Oriental del ejército también compartió una foto que supuestamente fue tomada de un buque de guerra patrullando cerca de Taiwán en la que se veía claramente la costa de la isla.

La televisión estatal china CCTV informó que los misiles chinos volaron directamente sobre Taiwán durante las maniobras, aunque no fue confirmado.

Pekín también dijo que realizaría un simulacro con fuego real en el sur del mar Amarillo -- situado entre China y la península de Corea-- desde el sábado hasta el 15 de agosto.

Pero Taipéi se mantiene desafiante e insiste que no se doblegará ante su “vecino malvado”.

Con información de AFP