El líder norcoreano Kim Jong Un abrió una reunión partidista para discutir el desarrollo agrícola del país, informó el lunes 27 de febrero la prensa estatal, tras reportes sobre “graves” carencias de alimentos en Corea del Norte.
Estos encuentros partidistas suelen celebrarse dos veces por año, pero el actual se realizó dos meses después de la plenaria anterior, también centrada en temas agrícolas.
La rara frecuencia de los encuentros sobre agricultura alimentó las especulaciones de que podría haber serias carencias alimentarias actualmente en Corea del Norte.
Kim presidió el domingo la apertura de la cita de autoridades para “analizar y revisar [...] el programa de la revolución rural en la nueva era y decidir las importantes tareas inmediatas y las tareas urgentes”, informó la agencia oficial KCNA.
Los asistentes “aprobaron la agenda por unanimidad y luego entraron a discutir” el tema, señaló KCNA sin dar más detalles.
Según el Ministerio surcoreano de Reunificación, ha habido reportes de muertes por hambruna en el Norte.
“Consideramos que la escasez de alimentos allí es grave”, dijo la semana pasada Koo Byoung-sam, portavoz del ministerio. Agregó que Pyongyang pareció haber solicitado ayuda al Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
El sitio web 38 North, que monitorea a Corea del Norte, indicó que considera la actual escasez de alimentos en el país como la más grave en décadas.
Precisó que un análisis de los precios del arroz y el maíz en el mundo y en Corea del Norte revelan una “significativa” divergencia desde inicios de 2021, lo cual implica que esos alimentos son mucho más caros en el Norte, un indicio del “colapso” del abastecimiento.
Sin embargo, un reciente comentario publicado por el principal diario estatal norcoreano, Rodong Sinmun, dijo que el país debe continuar su “economía autosuficiente” en su lucha contra “los imperialistas”.
Corea del Norte, que enfrenta múltiples sanciones por sus programas armamentistas, enfrenta dificultades de larga data por alimentarse.
El país es vulnerable a desastres naturales, como inundaciones y sequías debido a la ausencia de infraestructura, la deforestación y décadas de abandono estatal.
Esto se ha agravado por un prolongado cierre fronterizo desde el inicio de la pandemia del nuevo coronavirus, aliviada recientemente para permitir algo de comercio con China.
Corea del Norte ha sufrido repetidas hambrunas, una de las cuales cobró cientos de miles de vidas en los años 1990, aunque algunos calculan que murieron millones.
Mientras hay falta de alimentos en Corea del Norte, Kim Jong Un lanza más cohetes
El Gobierno de Corea del Norte afirmó haber disparado cuatro misiles crucero estratégicos y advirtió que el incremento de las maniobras militares conjuntas entre Washington y Seúl “pueden contemplarse como una declaración de guerra”.
Esta declaración llegó poco después de que los dos países aliados informaran sobre un ejercicio de “simulacro” en el Pentágono sobre cómo responder a un eventual ataque nuclear de Pyongyang.
La multiplicación de ensayos armamentísticos como los del pasado viernes 24 de febrero por parte del hermético país asiático hacen temer un posible ensayo nuclear que sería el primero desde 2017.
La agencia oficial norcoreana KCNA indicó que sus fuerzas armadas habían disparado cuatro misiles Hwasal-2, que recorrieron 2.000 kilómetros antes de impactar “con precisión” en el mar de Japón.
Según la KCNA, “los lanzamientos demostraron de nuevo la posición militar de las fuerzas de combate nuclear” norcoreanas, “capaces de responder a fuerzas hostiles”.
Estos lanzamientos tienen un gran costo económico que asume el estado norcoreano, recursos que podrían ir dirigidos a campesinos para fomentar la agricultura y poder dejar atrás la escasez de alimentos que presenta el país asiático.
Con información de AFP