Italia impondrá desde el jueves un toque de queda nacional para combatir la segunda ola de coronavirus, que se expande a ritmo alarmante en Europa y ha obligado a un reconfinamiento general en Francia e Inglaterra y parcial en Portugal.

En Italia, aún traumatizada por el primer brote en marzo, el jefe de gobierno, Giuseppe Conte, firmó un decreto que establece el toque de queda en todo el territorio nacional de las 22H00 hasta 05H00 locales a partir del jueves, con el objetivo de frenar el avance de la pandemia.

El Gobierno italiano decidió también el cierre de los centros comerciales los fines de semana así como de los museos. Todas las restricciones que se mantendrán en vigor hasta el 3 de diciembre.

Italia ha registrado más de 39.000 muertos y 750.000 contagios e intenta frenar las infecciones sin decretar por ahora el confinamiento total por temor al impacto económico.

Las 20 regiones de Italia serán divididas en tres zonas (verde, naranja y roja, en función de la gravedad epidemiológica), y las medidas serán más o menos restrictivas dependiendo de la situación de cada una, explicaron fuentes del Gobierno.

En todo el mundo, la pandemia de la covid-19 ha causado la muerte de 1.215.957 personas y contagiado a más de 47 millones de personas, según el balance de este miércoles de la AFP realizado a partir de datos oficiales.

Estados Unidos entre el luto y las elecciones

Cifras alarmantes que han enlutado con especial saña a Estados Unidos, que contabiliza 232.634 muertes, mientras este miércoles espera con ansiedad los resultados de las elecciones presidenciales en los que la gestión de la pandemia tuvo especial importancia.

Después de Estados Unidos, los países con más víctimas mortales son Brasil, con más de 160.000 muertos, India con 123.000, México con 92.593 y Reino Unido con 47.250.

América Latina y el Caribe siguen siendo la zona más castigada, con más de 404.000 fallecidos y 11,3 millones de contagios, aunque parece que la pandemia ha perdido virulencia en las últimas semanas.

Proporcionalmente a su población, Perú y Bélgica son los países más golpeados del mundo, con 105 decesos por cada 100.000 habitantes.

Esta semana, 13 de los 32 estados de México se sumarán a los ensayos clínicos de la fase tres de la vacuna contra el coronavirus del laboratorio chino CanSinoBio, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.

En los ensayos participará un grupo “de entre 10.000 y 15.000 voluntarios mexicanos mayores de 18 años”, precisó el canciller Marcelo Ebrard.

En las pruebas de la fase tres -la etapa previa a su autorización- participan entre 30.000 y 40.000 voluntarios de Chile, Argentina, Arabia Saudita, Pakistán, Rusia y China, añadió Ebrard.

Las últimas cervezas en un mes

En Europa, el primer ministro británico, Boris Johnson, insistió el miércoles en que el segundo confinamiento contra el coronavirus en Inglaterra, que empieza el jueves, terminará “automáticamente” el 2 de diciembre, pese a que uno de sus ministros advirtió previamente que podría prolongarse.

Tras meses de tensión por la pandemia, los pubs ingleses, epicentro de la vida social, se preparan a servir este miércoles las últimas cervezas en al menos un mes.

Las tiendas no esenciales de Inglaterra tendrán que cerrar, mientras que los restaurantes, pubs y cafeterías solo podrán ofrecer comida a domicilio.

En el Vaticano, el papa Francisco tuvo que volver a realizar sus audiencias de los miércoles de manera virtual, desde su biblioteca, sin la presencia de fieles y retransmitidas en video.

En Portugal, más de 7 millones de personas, el 70 por ciento de la población, volverán a estar confinadas a partir del miércoles durante al menos dos semanas, anunció el jefe del Gobierno, Antonio Costa, que no descarta adoptar medidas más estrictas.

En Rusia los contagios y muertes ya superan con creces los números registrados en mayo, durante el momento más álgido de la primera ola de la pandemia, pero las autoridades no prevén por ahora un confinamiento. En las últimas 24 horas el país registró 389 decesos por coronavirus y más de 19.000 nuevos casos.

En Austria, donde un ataque islamista causó la muerte de cuatro personas el lunes, se decretó el toque de queda nocturno y se han limitado las reuniones privadas.

Mientras la mayoría de los países europeos aumentan las restricciones pese al creciente descontento de la población, Finlandia ha logrado discretamente mantener los niveles de contagio cinco veces por debajo de la media de la Unión Europea (UE). El país registra 45,7 casos por cada 100.000 habitantes, la tasa más baja de la UE, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

¿El secreto? La acción rápida del Gobierno, que instauró un semiconfinamiento en marzo y prohibió los desplazamientos desde y hacia la capital, y sistemas eficaces de diagnóstico y trazabilidad con una aplicación.

*Con información de AFP