Un hecho insólito ha llamado la atención de la opinión pública después de que se conociera la historia de una madre de 41 años de edad que fingió una enfermedad terminal en su hija para recaudar fondos.
Pamela Reed habría mentido a sus amigos y familiares durante años sobre la salud de su hija de tan solo 7 años de edad a quien hizo pasar como una niña ciega y enferma que padecía de algunas anomalías médicas incluyendo leucemia.
La estafa había sido originada desde Ohio en Estados Unidos en la que la mujer se embolsó miles de dólares después de fingir que su hija pequeña padecía cáncer e incluso tenía convulsiones irregulares.
Según la Policía, la mujer decidió incluso raparle la cabeza a su hija con el fin de vender mejor la idea mientras que los miembros de la comunidad, engañados por la madre, “participaron generosamente en esfuerzos de recaudación de fondos y realizaron contribuciones monetarias para ayudar a la familia a compensar los costos médicos”, dijo la oficina del Sheriff en un comunicado.
Todo el plan se le cayó a la madre cuando una enfermera del colegio donde la niña asistía descubrió que la niña no estaba ciega del ojo derecho como había asegurado su madre, esto según una declaración jurada presentada a las autoridades.
El engaño de la madre llegó lejos, a la enfermera que estaba en el colegio le había dicho que a su hija le plantarían con el tiempo un “puerto” para los tratamientos contra el cáncer, lo que logró que la niña perdiera casi 280 horas de clase entre el 2023 y el 2024, como narra el diario New York Post.
“AR no tenía cáncer ni leucemia, y ella nunca tuvo cáncer ni leucemia”, dijo la enfermera en su momento cuando fue preguntada por la policía referente al estado de salud de la niña. La avalancha de documentos que Reed entregó a la escuela sobre el supuesto cáncer de AR eran todos falsos, afirmó el médico.
Cuando las autoridades cuestionaron a la madre de la menor sobre las sospechas de estafa, Reed confesó haber reenvasado recetas para que parecieran medicamentos contra el cáncer e incluso haber puesto en riesgo la salud de la menor al suministrarle medicamentos para las convulsiones que no necesitaba.
Cuando la policía la interrogó, Reed inicialmente intentó mentir antes de admitir que había llevado a cabo el engaño “porque le gustó el apoyo que recibió como resultado”, afirma la declaración jurada.
Reed ha estado publicando rutinariamente sobre los vuelos sanitarios inventados de AR en una página dedicada a su plan desde octubre de 2017, cuando la niña tenía solo 20 meses.
En ese momento, Reed afirmó que AR padecía anemia aplásica grave, una enfermedad en la que la médula ósea no produce suficientes células sanguíneas para el cuerpo, aunque no está claro si la enfermedad también fue inventada.
En la página, ha compartido varios enlaces a eventos de recaudación de fondos en línea a lo largo de los años (solo algunos de los cuales han sido eliminados desde entonces) que recaudaron miles de dólares que Reed supuestamente puso directamente en sus propios bolsillos.