Una tribu indígena en Brasil tiene una de las tasas de suicidio más altas del mundo. De acuerdo a Survival International, los guaraníes de Brasil presentan una tasa de suicidio 34 veces mayor que la del resto de la población del país suramericano.La causa: La pérdida de sus tierras ancestrales y los constantes ataques de grupos armados. Según datos recientes desde el inicio del año 2000, al menos un indígena se suicida cada semana.La población guaraní que se estima en 46.000 personas en el territorio brasileño, intenta recuperar aunque sea algunas de las zonas ancestrales que han ido perdiendo, pero se enfrentan con la resistencia de poderosos granjeros y la violencia de las industrias de la soya y la caña de azúcar.Otros datos que han impactado a las comunidades de apoyo internacional es que los indígenas han sido desplazados a zonas de la selva consideradas como "muy peligrosas", donde viven en condiciones deplorables, otros habitan cerca a las carreteras en "campamentos" sobrepoblados donde se enfrentan a malnutrición, pésimas condiciones de salud e incluso alcoholismo.De acuerdo con el Ministerio de Salud de Brasil, 56 guaraníes se suicidaron en el 2012, aunque se cree que la cifra puede ser mayor debido al no registro de otros casos. La mayoría de las muertes fueron por ahorcamiento con correas y cinturones.La última víctima conocida fue una adolescente de 17 años que se quitó la vida el miércoles 9 de octubre. La situación es crítica pues la mayoría de las muertes se dan en indígenas entre 15 y 29 años.Rosalino Ortíz un hombre guaraní le aseguró a una de las ONG que trabaja en la zona que "los guaraníes nos estamos suicidando porque no tenemos tierras, ni tenemos espacio para vivir. Antes éramos libres, pero ya no lo somos". "Nuestros jóvenes se sientan y no ven esperanza para ellos, por eso luego se suicidan", agregó.Según señaló el diario británico The Guardian en un informe especial, en el campo de Dourados donde habita un grupo de indígenas, la tasa de muerte es un 50 por ciento más alta que en Irak.Algunos indígenas activistas protestaron la semana pasada en en el Congreso en Brasilia en contra de la reforma constitucional que transfiere de la rama ejecutiva a la legislativa la autoridad para demarcar, aprobar y establecer las tierras de los nativos y los parques naturales.El propio ministro de Justicia Eduardo Cardozo consideró de inconstitucional la medida y según varios informes gubernamentales y no gubernamentales la delimitación de los territorios guaraníes debía estar lista desde hace muchos años atrás.El 12 por ciento del territorio de Brasil es considerado como territorio indígena y los nativos en el país están divididos en 305 tribus que a duras penas representan el 0.5 por ciento de los cerca de 200 millones de habitantes en el país.Stephen Corry director de Survival International dijo que la situación es crítica no solo para guaraníes sino para otros grupos indígenas y recordó como en 2012 los indígenas anunciaron un suicidio masivo por haberlos desterrado de tierras que ellos consideran sagradas.