La convivencia es un reto común para todas las personas que viven en áreas con poblaciones voluminosas o moderadas. De hecho, las disputas entre vecinos no son un tema aislado, y estas pueden ocurrir debido a varias motivaciones.
Fiestas hasta altas horas de la noche, sonidos demasiado fuertes, malos olores e inconformidades respecto a la tenencia de mascotas suelen ser solo algunas de las causas por las que los vecinos chocan entre sí. No obstante, en Alemania se conoció un caso bastante particular que ha llamado la atención en varios países del mundo.
Friedrich-Wilhelm y su esposa Jutta, residentes del municipio de Bad Salzuflen, en el noroccidente de Alemania, decidieron adoptar medidas mayores ante un caso que resulta cercano para las familias que viven en zonas campesinas. De acuerdo con el diario inglés The Times, la pareja denunció penalmente a su vecino debido al ruido que produce su gallo, el cual definieron como “una tortura”.
Según narraron Friedrich y Jutta en su exposición del caso, el gallo del vecino suele cacarear entre 100 y 200 veces al día. Adicionalmente, manifestaron que el canto del ave alcanza un volumen de hasta 80 decibeles, un nivel que comparan con el ruido de una vía con alto flujo vehicular.
Magda, como se llama el gallo en cuestión, desarrolló la costumbre de cantar durante gran parte del día. “Empieza desde las 8:00 a. m. porque está encerrado por la noche, pero luego canta entre 100 y 200 veces a lo largo del día”, señaló Wilhelm, el denunciante.
Así mismo, aseguró que ya han tenido que soportar durante dos años el incesante cacareo del gallo. En ese sentido, criticó que Magda ha desatado una “pesadilla” que no permite a los vecinos en general, disfrutar de la tranquilidad en sus respectivos hogares.
“No podemos usar el jardín ni abrir una ventana”, expresó Wilhelm a los medios alemanes. En consecuencia, junto a su esposa, decidieron llevar su caso a las instancias judiciales para exigir que el gallo sea retirado del sector.
“El vecino no renuncia a su gallo y tenemos que vivir con eso, o tenemos que ganar en los tribunales”, puntualizó Wilhelm.
Según explicó a los medios locales Torsten Gieseke, el abogado de la pareja que interpuso la denuncia, el gallo motivo de la discordia no es apto para vivir en una urbanización tranquila, pues el sector donde habita no es una zona rural.
Al parecer, Michael, el propietario de Magda, compró cuatro polluelos esperando que todos se convirtieran en gallinas para que pusieran huevos, sin embargo, uno resultó ser un gallo.
¿Por qué cantan los gallos?
Tradicionalmente, el canto del gallo ha sido asociado al amanecer, como si se tratara de una especie de despertador natural. De acuerdo con un estudio desarrollado por académicos japoneses, y publicado en la revista Current Biology, estas aves tienen un reloj interno que les alerta de la hora del amanecer.
Investigadores de la Universidad de Nagoya, en Japón, descubrieron que los gallos no necesitan señales externas de luz para saber cuándo comenzar a cantar. “Para nuestra sorpresa, nadie había demostrado la participación del reloj biológico en este conocido fenómeno experimental”, explicó a National Geographic el coautor del estudio, Takashi Yoshimura.
Durante los experimentos, Takashi Yoshimura y Tsuyoshi Shimmura expusieron a los gallos a 12 horas de luz y 12 horas de condiciones de luz débil durante 14 días. “Los científicos descubrieron que los animales comenzaban a cantar dos horas antes de la llegada de la luz del amanecer. En el segundo experimento, los gallos se mantuvieron bajo 24 horas de luz débil durante 14 días. Los investigadores notaron que los animales cantaban en días de 23,8 horas cuando pensaban que era el amanecer”, reseñó National Geographic.
No obstante, además de su particular canto que anuncia el amanecer, los gallos también realizan este sonido para marcar territorio o desafiar a otro gallo. De igual manera, lo hacen para cortejar a las hembras.