El debate entre los dos candidatos a la vicepresidencia causó impacto en la apretada elección por la Casa Blanca. En un cabeza a cabeza, J. D. Vance y Tim Walz hablaron de los temas más controversiales de esta contienda. En este momento, es tan estrecho el margen que separa a Donald Trump y Kamala Harris que cualquier movimiento de sus segundos al mando podría ser definitivo.

El debate fue organizado por la cadena CBS entre Walz, gobernador de Minnesota elegido por la demócrata Kamala Harris como su número dos, y el republicano Vance, senador por Ohio y compañero de fórmula del republicano Donald Trump. Los moderadores fueron Norah O’Donnell y Margaret Brennan.

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La primera pregunta fue alrededor de los sucesos de este martes y el ataque de Irán a Israel. Walz comenzó contestando: “Tengamos en cuenta dónde empezó esto”. Y narró los feroces ataques de Hamás contra Israel el 7 de octubre del año pasado. El candidato a la vicepresidencia aseguró que la capacidad de Israel para defenderse es “absolutamente fundamental”.

Vance, por su parte, se despachó contra la política exterior del gobierno de Biden y aseguró que los norteamericanos están preocupados por “el caos en el mundo” y “la sensación de que el sueño americano es inalcanzable”. Agregó que Donald Trump “consistentemente hizo que el mundo fuera más seguro”.

La migración fue uno de los temas que dividió a ambos candidatos. El demócrata Tim Walz acusó a su rival republicano J. D. Vance de “deshumanizar” a los extranjeros que buscan un mejor futuro en ese país. Cuando se acusa a los inmigrantes “de todos los problemas”, “los deshumanizamos y convertimos en villanos a otros seres humanos”, dijo Walz en el debate entre los dos aspirantes a la vicepresidencia en los comicios del 5 de noviembre. Agregó que Kamala Harris es “la única persona en esta carrera que procesó a bandas transnacionales por tráfico de personas e intervenciones de drogas”.

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Vance le contestó: “Son los ciudadanos estadounidenses cuyas vidas han sido destruidas por la frontera abierta de Kamala Harris. Tenemos que detener la hemorragia”, agregó.

Y otro tema candente fue el aborto. J. D. Vance acusó a los demócratas de ser “proaborto radicales”. Walz contestó: “No, no lo somos, somos promujer. Estamos a favor de la libertad de que [as mujeres] hagan su propia elección”.

Mientras tanto, Donald Trump posteó durante el debate en redes y en mayúscula: “TODO EL MUNDO SABE QUE NO APOYARÍA UNA PROHIBICIÓN FEDERAL DEL ABORTO, BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA”.

Este debate podría ser el último de las presidenciales de 2024. Trump ha rechazado enfrentarse en un segundo debate con Harris. Vance, de 40 años, y Walz, de 60, defienden ser la voz auténtica de los cruciales estados del Medio Oeste que podrían decidir por unos pocos miles de votos el ganador de unas unas elecciones que, según las encuestas, siguen empatadas técnicamente a cinco semanas de los comicios, el 5 de noviembre.

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La historia sugiere que los debates de los candidatos a la vicepresidencia rara vez influyen en los resultados, pero en una campaña electoral atípica en la que Harris ha sustituido al presidente Joe Biden en medio de la carrera, la contienda del martes puede sumar. El debate de los candidatos a la vicepresidencia “abrirá el apetito de mucha gente para el 5 de noviembre”, dijo a la AFP Thomas Whalen, profesor asociado de Ciencias Sociales en la Universidad de Boston.

Pero las tensiones en Oriente Medio, y en particular los cerca de 180 misiles lanzados por Irán contra Israel (que los interceptó) amenazan con opacar el debate.

*Con información de AFP.