A más de tres meses de que el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro culminara su estadía en el Palacio de Planalto, su nombre continúa situándose no solo en la prensa nacional, sino fuera de esa nación. Desde el mes pasado, el mandatario anunció su regreso al ‘gigante suramericano’ para liderar la oposición ante la administración de Inácio Lula da Silva.
Sin embargo, el exjefe de Estado se enfrenta ahora a nuevos procesos judiciales que se remontan a cuando estaba en funciones. Uno de estos se relaciona con la pandemia de coronavirus y el presunto desperdicio de casi dos millones de dosis de vacunas que fueron donadas por Estados Unidos en 2021, un año después de que se expandiera el virus a nivel global.
De acuerdo con CNN Brasil, que cita al Tribunal de Cuentas Federal (TCU), de ese total de fármacos el Ministerio de Salud solo distribuyó unas 260.000, mientras que las restantes fueron destruidas una vez llegado el tiempo de expiración (31 de diciembre de ese mismo año). La acusación agrega que el Gobierno destinó fondos para el proceso de transporte e incineración de estos, en lugar de repartirlos a tiempo entre la población.
Millonarias pérdidas en la pandemia
Ese medio internacional recogió las palabras del reporte hecho por el Tribunal Federal de Cuentas (TCU) que apuntó a que “las diferentes fallas en la falta de planificación y estrategia para la distribución de las vacunas donadas” obligaron a asumir costos por el valor de 993.034,16 reales (casi 900 millones de pesos colombianos), que deben caracterizarse como daños a la tesorería”.
El proceso judicial, que ahora pide la comparecencia de presuntos responsables, no solo ‘permea’ a Jair Bolsonaro sino que enfatiza en que el Ejecutivo firmó la aceptación de esas vacunas sin hacer una evaluación de distribución. Lo anterior, en relación a que el lapso para repartirlas por todo el país era de unos tres meses, tiempo después del cual caducarían y llevarían a gastos (como los de transporte) ‘innecesarios’.
“Pese a los esfuerzos por destinar las vacunas”, no solamente en Brasil, sino “para su uso en otras naciones, no se alcanzó el éxito en el uso de las dosis en su totalidad, teniendo en cuenta que estas no pudieron ser utilizadas por su fecha de vencimiento”, recopiló la cadena CNN Brasil sobre el reporte del TCU.
La polémica por joyas regaladas
El expresidente Bolsonaro está envuelto en otro escándalo por un pedido a explicar en detalle su relación con joyas que habrían sido regaladas por Arabia Saudita e ingresado al país sin la correspondiente declaración. El tribunal que fiscaliza las cuentas dijo que el exmandatario no podrá hacer uso de las mismas hasta que no se haya resuelto el ‘misterio’ que se remonta a 2021 y que lo sitúa en la polémica, tras un reporte hecho por el diario O Estado de S. Paulo.
Ese medio informó que las autoridades tributarias incautaron en octubre de ese año joyas valoradas por 3,2 millones de dólares en la maleta de un funcionario del Ministerio de Minas y Energías, tras su regreso de Medio Oriente.
Estas no habrían sido declaradas por la comitiva del Gobierno en el aeropuerto Guarulhos de São Paulo. El Tribunal de Cuentas de la Unión determinó que tanto Bolsonaro como el exministro, Bento Albuquerque, deben dar explicaciones.
Entre lo que las autoridades esperan conocer se halla si esos ‘regalos’ estaban destinados al expresidente y la primera dama o si se dirigían a los activos del Estado. Por su lado, Bolsonaro se defendió de los señalamientos. “Me están acusando de un regalo que no pedí ni recibí, no existe ninguna ilegalidad”, dijo a CNN Brasil.
Según la ley de Brasil, si se ingresa al país con “mercaderías” superiores a los mil dólares es necesario hacer la respectiva declaración y pago de impuestos.
*Con información de AFP.