Creciente interés ha despertado en Argentina un artículo recientemente publicado por el medio estadounidense ‘The Washington Post’, en el que bajo el titular “He raffles off his salary. He could be Argentina’s next president”, se recogen las principales características de un político local llamado Javier Milei, quien, previo a que se decante el nuevo partidor para la carrera presidencial, se perfila como el favorito de los votantes de ese país, y promete convertirse en la tercería, para quienes no decantan su favoritismo en los extremos representados por el expresidente Macri y el actual dirigente Alberto Fernández.
En el artículo, escrito por el periodista David Feiba, y publicado el pasado lunes en el referido medio de comunicación, se destaca la forma en la que en Milei confluye el sentir de un amplio espectro de argentinos, logrando simpatías en todos los sectores políticos, y mostrando cumplimiento en promesas, como la que elevó previo a su elección como parlamentario, en la que advirtió que no estaba dispuesto a recibir el salario que percibe por su labor legislativa, señalando que “es dinero sucio”, y entregándolo a la ciudadanía a través de un sorteo para el que se inscribieron cerca de 2,4 millones de personas.
En su artículo, en el que analiza el fenómeno político en el que se perfila Milei, a quien señala como ‘el próximo presidente de Argentina’, el periodista del diario estadounidense recoge visiones de expertos en la política argentina, incluida la de Lucas Romero, director de la consultora Synopsis, quien a su turno exaltó una de las principales virtudes del político, advirtiendo que este logra “articular la bronca de la gente mejor que ningún otro”, refiriéndose a la capacidad del político de canalizar el sentir del argentino de a pie, frente a algunos aspectos como su oposición a los sectores políticos tradicionales, sobre quienes señala que son los responsables de la actual situación económica que atraviesa el país, advirtiendo ‘pobres resultados’.
Según el artículo de Feiba, “Milei sería el más radical de un grupo de libertarios que lograron avances en las elecciones de mitad de mandato de 2021″, exaltando el éxito de sus posturas frente a la necesidad de reducir o contraer el aparato burocrático del país.
Otro de los aspectos, incluso más allá del éxito del político en los diversos sectores del espectro político, factor que podría servirle como factor unificador, el Post también versa sobre la forma en la que el discurso de Milei logra aceptación y simpatía dentro de sectores de electores jóvenes, destacando la forma en la que estos se apropian del discurso del posible aspirante presidencial y lo hacen propio al difundirlo a través de las distintas plataformas virtuales.
En el texto, en el que el Post recoge el perfil de este candidato de cabellera conspicua y abundantes patillas, también se recogen testimonios de algunos electores, quienes, incluso manifestándose decepcionados de las posturas del actual gobierno y el precedente, señalan que han puesto sus esperanzas en el nuevo candidato, buscando una senda que por fin dé luz a una senda clara para sacar del estancamiento a Argentina.
“Los políticos solo se acuerdan de nosotros cuando es el momento de votar. Para mí, es Milei o un pasaje de ida. Él es mi última esperanza”, señala uno de los electores citados por el periodista de The Washington Post.
En su artículo, el Post también recoge algunas de las posturas del actual diputado, miembro de la colectividad Libertad Avanza, quien ataca algunas características del funcionamiento estatal, incluso señalando a la institucionalidad como un “Estado criminal”, rechazando los métodos de recolección de impuestos, y manifestando la necesidad de mejorar las dinámicas fiscales para que las contribuciones puedan ser más bajas, pero mejor destinadas.
Según Milei, es necesario “entrar al sistema para detonarlo desde adentro”, señalando a su turno también, sobre la coyuntura regional que la salida de América Latina, está ligada a que la región “abrace las ideas de libertad”.
Sobre el diputado, el Post también recoge que es un economista, en cuyo discurso logran confluir sentimientos de apatía y pesimismo del electorado, según citan los analistas referidos en el texto, quienes también notan la visión poco positiva frente al futuro económico de la población argentina.