El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo en las últimas horas que EE. UU. apoya al pueblo cubano que está protestando en contra de la difícil situación económica a la que llegó la isla por culpa del régimen de Fidel Castro.
“Apoyamos al pueblo cubano y su clamor por la libertad y el alivio del trágico control de la pandemia y de las décadas de represión y sufrimiento económico a las que ha sido sometido por el régimen autoritario de Cuba”, dijo Biden en un comunicado obtenido por el portal McClatchy.com.
El mandatario estadounidense añadió que las protestas en Cuba son un llamado al deseo de la libertad.
“El pueblo cubano está afirmando con valentía los derechos fundamentales y universales. Esos derechos, incluido el derecho a la protesta pacífica y el derecho a determinar libremente su propio futuro, deben ser respetados”, dijo Biden.
También invitó al gobierno cubano del presidente Miguel Díaz-Canel para que escuche a los manifestantes y se lleguen a acuerdos.
“Estados Unidos hace un llamado al régimen cubano para que escuche a su pueblo y atienda sus necesidades en este momento vital en lugar de enriquecerse”, dice el comunicado de Biden.
Las declaraciones del presidente salen a la luz un día después de que miles de cubanos salieran a las calles para protestar en contra del régimen, teniendo en cuenta la crisis económica y la difícil situación social que vive el país.
De acuerdo con Amnistía Internacional (AI), durante las protestas del domingo hubo represión por parte de las autoridades cubanas, pues se registraron detenciones, disparos y ataques contra la prensa.
Debido a lo anterior, el asesor de Seguridad Nacional del gobierno estadounidense, Jake Sullivan, advirtió a Cuba que no utilice la violencia contra ciudadanos que se unieron a raras protestas contra el gobierno.
“Estados Unidos apoya la libertad de expresión y reunión en Cuba, y condenaría fuertemente cualquier uso de violencia contra manifestantes pacíficos que están ejerciendo sus derechos universales”, señaló el funcionario en Twitter.
Y es que según Amnistía Internacional, durante las manifestaciones hubo una fuerte presencia militar, que derivó en detenciones y violencia contra los que se manifestaban.
“Se reportan personas heridas por disparos de la policía, detenciones arbitrarias, amenazas y ataques a periodistas, incluido fotógrafo de la agencia AP, fuerte presencia militar en las calles y un gobierno intolerante”, dijo en sus redes sociales Erika Guevara Rosas, directora de AI para las Américas, con sede en México.
De igual manera, Human Rights Watch (HRW) exigió al régimen cubano que respete las protestas y la vida de los manifestantes que participan en ellas.
“Cientos de cubanos han salido a protestar hoy en el país. Muchos están cansados de los abusos del régimen y ya perdieron el miedo. Exigimos que se respeten sus derechos humanos”, dijo en redes sociales el director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco.
Las protestas se han vuelto tan virales que la situación de Cuba llevó a funcionarios de Estados Unidos a pedir una intervención llevada a cabo por Estados Unidos para derrocar el gobierno de La Habana. El alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, encabeza los llamados para una posible intervención de su país.
‘Los cubanos son dignos y están dispuestos a gobernarse a sí mismos sin tiranía’, dijo el domingo el mandatario.
Suárez también aseguró en rueda de prensa que ha estado en contacto con el Departamento de Estado para monitorear de cerca las protestas pacíficas en la isla. Sobre la misma línea, y en compañía de otros políticos y activistas, dijo que “el régimen castrista debe acabarse ya, esto no es negociable” y realizó un llamado a no “darle la espalda ahora” a las personas que han lanzado el grito en contra del régimen.
“Pedimos a la Policía Nacional y a las Fuerzas Armadas en Cuba que apoyen a su gente, como al parecer, la Policía lo está haciendo en este momento”, aseguró el alcalde, mientras centenares de cubanos emigrantes se manifestaban en el emblemático restaurante Versailles en el sector de la Pequeña Habana en Miami.